Luis Rubiales renunció como presidente de la Real Federación Española de Fútbol
A 21 días del beso a Jenni Hermoso tras la histórica conquista del Mundial femenino, y 15 desde la estrambótica asamblea extraordinaria en la que se atrincheró en su puesto y disparó contra todo y contra todos, Luis Rubiales ha terminado por certificar su caída y ha presentado ayer su dimisión como presidente de la Real Federación Española de Fútbol, tal y como se lo ha trasladado al actual presidente en funciones, Pedro Rocha. Rubiales ha desvelado primero su decisión en una entrevista con el periodista Pierce Morgan. Era su primera comparecencia pública desde su discurso en Las Rozas ante los asambleístas. Luego, ha confirmando su renuncia en la red social X.
“Es evidente que no podré volver a mi cargo. Insistir en quedarme a la espera y aferrarme a ello no va a contribuir a nada positivo, ni a la Federación ni al fútbol español. Entre otras cosas, porque hay poderes fácticos que impedirán mi vuelta”, apuntó el dirigente, que ha anunciado también que deja su puesto como vicepresidente de la Uefa, para el que fue elegido en 2019.
En su comunicado de despedida, en el que no hay ninguna mención para Hermoso, el ya exdirigente asegura también que con su decisión busca no perjudicar al fútbol español: “No quiero que el fútbol español pueda resultar perjudicado por toda esta campaña tan desproporcionada y, sobre todo, tomo esta decisión tras haberme asegurado de que mi marcha contribuirá a la estabilidad que va a permitir que tanto Europa como África sigan unidas en el sueño de 2030, que permitirá traer a nuestro país el mayor evento del mundo”, sostuvo.