El sentido que le damos al regalo
“Más que la cantidad de regalos que los chicos reciben, la clave está en el sentido que se otorga a esos regalos. Vale decir, si se regala para cumplir un deseo de los chicos o si se hace para compensar el tiempo que no se está con ellos. Cuando esto sucede, cuando, de alguna manera, el motor del que regala es la culpa, se desvirtúa el sentido del regalo.”
Con relación a si el recibir demasiados regalos tiene la consecuencia de convertir a los chicos en más consumistas, eso es algo relativo. En realidad estamos en una sociedad consumista y más que la cantidad de regalos recibidos, lo que va a definir la actitud que tome el chico frente al consumo va a depender de lo que le transmitan los padres. Si los padres son consumistas, los hijos los van a imitar, reciban la cantidad de regalos que reciban”.
Lo importante es entender que, en el acto de hacer regalos se están transmitiendo valores.
Otro tema a tener en cuenta es qué regalo elegir y cómo hacerlo.
Se recomienda, en este sentido el diálogo con los chicos para saber cuál es su deseo, pero no con la idea de cumplirlo a rajatabla, sino de tenerlo en cuenta, de considerarlo.
En la actualidad muchos chicos prefieren los artículos electrónicos porque quieren imitar a los padres, a los que ven con el celular, la computadora a la tablet. Pero es razonable que el padre ponga límites en este aspecto, eligiendo a conciencia la edad en que un chico puede disponer de un dispositivo propio.
Por otra parte es bueno que los regalos que se hagan sean variados y que contemplen a aquellos que favorecen el estímulo a la imaginación del chico, como los juegos didácticos, los libros o los juegos de mesa”.
(*) Psicóloga