SALUD
La mitad de las adolescentes tiene miedo de engordar
Los mayores porcentajes se dan en las mujeres, a quienes las atemoriza ser “gordas”. La importancia de la imagen y la alimentación en los jóvenes. Una especialista de Aluba explica la problemática.
La imagen en la etapa de la adolescencia cobra gran importancia. Pero, ¿qué pasa cuando esa imagen está distorsionada? O aún peor, ¿cuando se crea un culto alrededor del cuerpo? Es allí donde los especialistas señalan que pueden desencadenarse los trastornos en la alimentación.
Según las últimas cifras de la Asociación de Lucha contra la Bulimia y Anorexia (Aluba) el 51,43% de las adolescentes siente temor por subir de peso y más del 33% de los encuestados está atemorizado por la posibilidad de ser gordo.
El relevamiento se llevó a cabo a través de una encuesta de Conducta Alimentaria en 19 colegios con más de 1000 alumnos de CABA y GBA.
Otro dato significativo fue que el 28,52% de los alumnos padecen desórdenes alimenticios.
"Sabemos que su humor y sus conductas pueden estar modificados por la percepción de su imagen corporal y la opinión del otro. Si a esto entonces le agregamos la presión social, tanto de sus pares como del mundo en general, obtenemos un resultado preocupante", señala el licenciado Marcelo Bregua, psicólogo clínico y coordinador general de Aluba.
El origen de los miedos
"Cuando empieza el crecimiento hay una especie de malestar social y eso se traduce al cuerpo. Por ejemplo, cuando las mujeres nos encontramos nos decimos: 'qué flaca que estás'. Todo eso rodea a un adolescente. El miedo a la vergüenza, a quedarse solo, hace que los chicos centren todo en el cuerpo porque es el único requisito para triunfar", asegura a Infobae la doctora Mabel Bello, asesora médica de Aluba.
Y cada vez crecen más las cifras: "Las chicas son víctimas de la cultura que tenemos hoy", agrega Mabel, quien además destaca que las estudiantes de cuarto grado suelen repetir: 'Cuando sea grande, quiero ser flaca'.
Pero esto no ocurre sólo con las mujeres, sino que en los hombres también sucede: "Los chicos están creciendo dentro de un concepto de belleza: se depilan, usan cremas, se maquillan".
"La sociedad empuja a concentrarse con el cuerpo. Hoy muchos pediatras les dicen que bajen dos kilitos a los chicos. En la edad de crecimiento, si a un chico se lo somete a adelgazar, muy posiblemente va a terminar con problemas de peso. A los chicos hay que enseñarles a comer con protocolo, es decir, hacer una pausa, conversar, portarse de una manera social en la mesa y no a centrarse en la comida porque va a comer tres veces más", agrega la doctora.
"Si analizamos la publicidad, la mitad son dietas para adelgazar y la otra, comida".
¿Cómo ayudarlos? Mabel sugiere que se los acompañe a encontrar sus propios talentos, a tener vínculos sociales afines y a dejar de poner la mirada en el cuerpo.
Según las últimas cifras de la Asociación de Lucha contra la Bulimia y Anorexia (Aluba) el 51,43% de las adolescentes siente temor por subir de peso y más del 33% de los encuestados está atemorizado por la posibilidad de ser gordo.
El relevamiento se llevó a cabo a través de una encuesta de Conducta Alimentaria en 19 colegios con más de 1000 alumnos de CABA y GBA.
Otro dato significativo fue que el 28,52% de los alumnos padecen desórdenes alimenticios.
"Sabemos que su humor y sus conductas pueden estar modificados por la percepción de su imagen corporal y la opinión del otro. Si a esto entonces le agregamos la presión social, tanto de sus pares como del mundo en general, obtenemos un resultado preocupante", señala el licenciado Marcelo Bregua, psicólogo clínico y coordinador general de Aluba.
El origen de los miedos
"Cuando empieza el crecimiento hay una especie de malestar social y eso se traduce al cuerpo. Por ejemplo, cuando las mujeres nos encontramos nos decimos: 'qué flaca que estás'. Todo eso rodea a un adolescente. El miedo a la vergüenza, a quedarse solo, hace que los chicos centren todo en el cuerpo porque es el único requisito para triunfar", asegura a Infobae la doctora Mabel Bello, asesora médica de Aluba.
Y cada vez crecen más las cifras: "Las chicas son víctimas de la cultura que tenemos hoy", agrega Mabel, quien además destaca que las estudiantes de cuarto grado suelen repetir: 'Cuando sea grande, quiero ser flaca'.
Pero esto no ocurre sólo con las mujeres, sino que en los hombres también sucede: "Los chicos están creciendo dentro de un concepto de belleza: se depilan, usan cremas, se maquillan".
"La sociedad empuja a concentrarse con el cuerpo. Hoy muchos pediatras les dicen que bajen dos kilitos a los chicos. En la edad de crecimiento, si a un chico se lo somete a adelgazar, muy posiblemente va a terminar con problemas de peso. A los chicos hay que enseñarles a comer con protocolo, es decir, hacer una pausa, conversar, portarse de una manera social en la mesa y no a centrarse en la comida porque va a comer tres veces más", agrega la doctora.
"Si analizamos la publicidad, la mitad son dietas para adelgazar y la otra, comida".
¿Cómo ayudarlos? Mabel sugiere que se los acompañe a encontrar sus propios talentos, a tener vínculos sociales afines y a dejar de poner la mirada en el cuerpo.