Tras la bajante del agua en la Laguna, estudian realizar la obra del espigón
Presentarán un proyecto para poder repararlo. “Se lo presentaré al intendente, Pablo Petrecca, para poder conseguir la financiación. Si nos dan el visto bueno, empezaremos con el pedido de financiamiento y la licitación”, dijo el titular de Obras Públicas, Marcelo Balestrasse.
A más de cinco años de su cierre, presentarán un proyecto para reparar el espigón de la Laguna de Gómez, en el marco de una sequía que ayudará a facilitar los trabajos por la falta de agua en las bases.
El secretario de Obras Públicas, Marcelo Balestrasse, explicó que se está realizando el presupuesto de la obra, que “se lo presentaré al intendente, Pablo Petrecca, para poder conseguir la financiación. Si nos dan el visto bueno, empezaremos con el pedido de financiamiento y la licitación”.
“Es más fácil arreglarlo, pero la fundación de los pilotes hay que hacerla igual. Por ahí es menos dificultoso porque hay cosas para hacer que con agua se complican y ahora se puede trabajar más cómodo. Pero hay que fundar abajo, donde hacés un pozo y hay agua”, dijo.
"El proyecto más viable, racional y económicamente posible es trabajar y avanzar por encima del espigón existente, por lo que el actual no se va a demoler porque será utilizado como medio para construir una nueva estructura. Lo primero que se debe realizar es el apuntalamiento correspondiente, luego la construcción de un sistema de pilotes, a mucha profundidad a ambos lados del espigón. Allí se apoyan unas vigas y por encima de eso las losas, que conforman los 150 metros que tiene de recorrido el espigón", subrayó.
El proyecto consiste “en una nueva estructura que esté por encima de la existente”, subrayó. Y finalizó: “Se busca recuperar un valor que no solo es caro a los sentimientos y la imagen de esta laguna, sino también al valor social, recreativo y deportivo que tiene el espigón. No nos olvidemos que este lugar es sede de triatlones, acá se realizan los cruces, es la largada y la llegada de la Fiesta del Pejerrey, más allá de la postal, ya que es un ícono de la Laguna".
Analizan el agua por el cambio de color
Como informó Democracia en la edición de este sábado, producto de la sequía que afecta la Región, similar a la de 2009, el agua de las lagunas de Junín comenzó a presentar una tonalidad verdosa que preocupa.
Además, la bajante que experimenta el río Salado provocó la mortandad de peces en los espejos de agua del Partido y la Región, ya que genera déficit de oxígeno, de acuerdo con los informes realizados por el Gobierno de la Provincia.
Según los expertos, la coloración de la superficie tiene relación con la fuerte presencia de algas favorecidas por el estancamiento, la baja del caudal y el clima cálido, pero tampoco descartan que sean cianobacterias.
Al respecto, el presidente de la Autoridad del Agua (ADA) de la provincia de Buenos Aires, Luis Siri, afirmó a Democracia que “este florecimiento se produce por las altas temperaturas y por el estancamiento del agua”.
“La Municipalidad ya nos está enviando muestras del agua para analizarlas en la ADA. En los próximos días sabremos de qué se trata”, agregó
“Por ejemplo, la aparición de cianobacterias en el río de La Plata a fin de año pasado fue favorecida por los aportes de fósforo y nitrógeno de manera natural o por algún vuelco industrial o de planta depuradora”, subrayó.
Estas bacterias, generalmente, se encuentran en aguas estancadas, con escaso flujo, por lo que es muy frecuente verlas en lagunas, zanjas o ambientes de aguas quietas, aunque también pueden encontrarse en las márgenes de los ríos y los arroyos.
El secretario de Control y Monitoreo Ambiental de la Nación, Sergio Federovisky, explicó que “la floración de algas azul verdosas, o cianobacterias, está directamente relacionada con la presión de nutrientes orgánicos en el agua, principalmente de fósforo y nitrógeno, en combinación con temperaturas altas", explicó el funcionario.
"Esto significa que son bacterias que se alimentan de esa materia orgánica con la que pueden realizar una fotosíntesis muy particular. El exceso de esos nutrientes en el agua permite una floración exagerada de esas algas, por eso las aguas se tornan de color azul-celeste o verdosa", indicó Federovisky, un biólogo especializado en ecología.
Federovisky contextualizó el fenómeno en la gran cantidad de desechos cloacales, industriales, fertilizantes y pesticidas que se vuelcan a los cursos de agua, que elevan el nivel de contaminación.
“Lo que yo consideraría más probable es que haya varias fuentes (motivos) que, al sumarse, hacen que el agua tenga una carga orgánica superior a lo normal", agregó.
“Afecta a la actividad turística”
Luis Bortolato, director de Turismo de la Municipalidad de Junín, afirmó a Democracia que “el fenómeno climático de la sequía cambió y afectó la coloración del agua. Se mandaron muestras de distintos puntos de la Laguna de Gómez, donde normalmente la gente se mete al agua, y se están esperando los resultados”.
Y el funcionario admitió que la sequía “afecta el entorno natural y las especies que habitan en él. Y por supuesto que afecta a la actividad turística, que depende del recurso”.