Alomar junto a sus familiares, en La Paz.
Alomar junto a sus familiares, en La Paz.
POLIDEPORTIVO

Eugenia Alomar y una destacada actuación en el IronPaz de Entre Ríos

La deportista juninense finalizó, con éxito, el triatlón, que se llevó a cabo el domingo pasado, en La Paz. La representante local culminó sexta en clasificación general, al cabo de 14 horas y 50 minutos, luego de 6 kilómetros de natación, 180 kilómetros de ciclismo y 42 kilómetros de pedestrismo.

Eugenia Alomar tuvo una destacada actuación en el IronPaz de Entre Ríos, el domingo pasado, y finalizó sexta en la clasificación general.  

La deportista juninense culminó, con éxito, el triatlón, al cabo de 14 horas y 50 minutos, luego de 6 kilómetros de natación, 180 kilómetros de ciclismo y 42 kilómetros de pedestrismo. 

La representante local habló con Democracia y se refirió a las sensaciones que le dejó la competencia en la ciudad entrerriana, el fin de semana pasado. 

“La viví con una alegría bárbara, a pesar de que la gente diga que es una tortura. Se largó a las 8 y 10 de la mañana. Nadé 6 kilómetros en el Río Paraná, tardé aproximadamente 50 minutos, después se pasó a la parte de ciclismo, que fueron 180 km y tardé seis horas, y después los 42 kilómetros de maratón, que tardé bastante porque me costó. Terminé alrededor de las 23”, manifestó. 

“Nunca me llevó tanto tiempo hacer un Ironman, pero hice la competencia, prácticamente sin comer ni tomar líquido. En este tipo de competencias, te dan 17 horas para entrar, es el tiempo de límite y de corte. Yo tardé 14 horas y 50 minutos. Éramos 11 mujeres, fui la sexta y salí segunda en mi categoría”, expresó. 

Alomar, de 43 años, mencionó cómo fue la preparación previa y afirmó que entrena sola, de manera particular, hace varios años. 

“Fueron siete meses, con muchos kilómetros de bicicleta por día, por ejemplo, hay días que pedaleo 130 km y después corro 15 km, hay otros que pedaleo 140 km y luego nado una hora y media. Voy alternando porque te tiene que parecer natural pasar de una disciplina a la otra”, indicó. 

“Es mucho trabajo preparar este tipo de carreras porque son muchas horas de entrenamientos y es un sacrificio muy grande porque te privás de todo. Me entreno sola, ya sé lo que tengo que hacer después de tanto tiempo en la actividad”, aseguró. 

Por último, la atleta local habló sobre sus objetivos deportivos y tuvo palabras de agradecimiento para sus allegados, que la acompañan en la disciplina. 

“Mi sueño es llegar al Ultraman, que es más grande que el IronPaz. Si lo hago, sería en marzo de 2025 y tendría un año para prepararlo. Se realiza en Villa General Belgrano, Córdoba, y es más largo en distancia, pero entre disciplina hay alrededor de 7 horas de descanso. Son 10 km de nado, 500 km de ciclismo y 92 de atletismo, pero se hace un corte en el medio para que sea posible llegar y hacerlo”, declaró.  “Le agradezco mucho a mi familia, que es muy importante, a mi mamá Estella Obrien, a mi papá Sergio Alomar, mis hermanos Candelaria, Pío y Luciana, a mis hijos Franco y Lucio Delmenico y a mi novio Ángel Papa y también el apoyo mecánico de la bicicleta de Mario Rodríguez”, concluyó.

COMENTARIOS