El Gobierno de Estados Unidos lanzó un aviso por la venta de una cuna que provocó la muerte de 10 bebés

La compañía se defendió y dijo que no iba a retirar el modelo del mercado.

La Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor de Estados Unidos (CPSC) advirtió a los estadounidenses acerca de los peligros de la cuna lamada “Rock ‘n Play”, de la marca Fisher-Price, a partir de una investigación que derivó en el resultado de que al menos 10 bebés murieron al usarla.

Según explican, las muertes se ocasionaron porque los bebés rodaron de estar de espaldas hasta quedar sobre el estómago o de costado, sin estar agarrados. Las diez víctimas tenían tres meses de nacidos, por lo tanto, la CPSC recomendó dejar de usar el producto cuando los bebés cumplen los tres meses de edad o tan pronto como el bebé muestre la capacidad de voltearse.

Un día después de la publicación del reportaje, la Academia de Pediatría Americana urgió a la CPSC a retirar la cuna de la venta pero la marca, Fisher Price se defendió diciendo que en realidad la cuna tiene tres posiciones distintas para sujetar al bebé y que no es recomendable que duerman sin estar sujetos. 

Tanto la Comisión como Fisher-Price recordaron algunas medidas de seguridad para que no ocurran nuevas muertes.  “Los consumidores que deben crear un entorno para dormir que sea seguro para los bebés, ya sea usando una cuna, un moisés, un corral o un producto para dormir inclinado”, explicaron.

“Nunca añada mantas, almohadas, muñecos de peluche u otros artículos al lugar donde el bebé duerme y siempre ponga al bebé a dormir boca arriba”, recomendaron.