Banksy, el célebre y misterioso artista callejero, volvió a sorprender y emocionar
El grafitero que hace décadas logra alto impactó con grafitis como los de dos policías londinenses besándose, reapareció con una serie de animales titulada “Zoo de Londres”. Una de las obras fue robada a la hora de ser revelada y la última, una garita policial convertida en pecera, fue denunciada.
La cara de Banksy es un misterio. Pero la obra de este artista urbano que les da un giro artístico siempre impactante a las fachadas de viejas casas de -principalmente- Londres y elementos emblemáticos del paisaje cotidiano de la capital inglesa, es mundialmente conocida. Y ahora, fiel a su estilo, sorpresa y originalidad se combinan en la última de sus performances: una garita policial de vidrio a prueba de balas que él convirtió en una simpática pecera donde nada un cardumen de pirañas.
Esta es la séptima creación del misterioso grafitero que aparecieron en la última semana en el paisaje londinense y forma parte de la serie bautizada como "el zoo de Londres". Por orden de aparición, esta serie "animal" arrancó el lunes en el barrio de Kew Green, en Richmond, al suroeste de la capital, con una cabra en lo alto de una cornisa de la que se desprenden varias rocas mientras una cámara real de vigilancia apunta a ella.
A esta primera obra le siguieron dos elefantes asomándose a través de una ventana en Chelsea y, después, tres monos colgando de un puente en una estación de metro cerca del mercado de Brick Lane.
El jueves fue el turno de un lobo aullando dentro de una antena parabólica en el barrio de Peckham, al sureste de Londres. Pero duró poco: fue sustraída una hora después de su publicación en redes sociales. Un grupo de encapuchados subió al tejado del local donde estaba el artefacto con el dibujo con una escalera, desmontó la antena parabólica y salió corriendo por la avenida con la creación de Banksy ante la mirada azorada de quienes observaban al lobo.
¿Cuánto cuesta un Banksy?
Los ladrones no eligieron mal el botín: el precio de una obra de Banksy puede variar entre 10.000 y 50.000 dólares. Pero en subastas ese precio puede subir significativamente dependiendo de la pieza y su historia. Por ejemplo, una de sus obras más famosas, “El amor está en la papelera”, que se autodestruyó parcialmente durante una subasta, se revendió por unos 17 millones de dólares.
Y las pirañas parece que tampoco tendrán calma. En un comunicado remitido a los medios antes de que el propio Banksy confirmara su autoría, la Policía informó de que estaba "al tanto" de los "daños criminales" causados a una garita en la calle Ludgate Hill, en el corazón del Londres antiguo. Apareció a media mañana de ayer domingo y al poco tiempo de descubierta se desplazaron hasta allí agentes del orden para tomar fotos y abrir el expediente de denuncia.
Los peces llegaron luego de la silueta de un gato negro estirándose que apareció el sábado en un cartel de publicitario abandono en el barrio Cricklewood, al noroeste de Londres.
El dueño del cartel –de maderas viejas a la vista enmarcadas por una enrededadera- desmanteló la obra poco después por motivos de seguridad y, según la Policía, tiene previsto donarla a una galería de arte.
Esta nueva serie de creaciones de animales renovó el romance que Banksy tiene con sus seguidores. El viernes, el artista callejero había "golpeado" en el en el barrio obrero de Walthamstow en el frente de un establecimiento de comida rápida llamado Bonners Fish Bar, donde pintó dos pelícanos "pescando" un par de peces, uno de ellos integrado en el propio cartel del restaurante de "fish and chips" (pescado y papas fritas, plato tradicional en Reino Unido).
Arte contestatario
Para realizar las pirañas, Banksy parece haber utilizado un aerosol translúcido para transformar la garita en una gran pecera en la que los peces, están pintados con más detalle que en sus anteriores creaciones. Difieren así de las siluetas negras de la cabra, los elefantes, el lobo, pelícanos y el gato.
Banksy es conocido por denunciar y visibilizar problemáticas sociales, políticas y medioambientales a través de su arte callejero en varias partes del mundo; y sus obras son tan cotizadas como celebradas por sus seguidores que rápidamente se replican en remeras, entre otras réplicas.
Algunas de las más famosas: la “Niña con globo”, de 2002, muestra a una niña soltando un globo en forma de corazón. “Kissing Coppers”, de 2004 muestra a dos policías besándose y fue creada en Brighton, Inglaterra. “Brexit” es un mural en la ciudad costera de Dover que muestra a un trabajador quitando una estrella de la bandera de la Unión Europea, simbolizando la salida del Reino Unido del bloque europeo. Y “Soldado tirando flores” fue pintada en el muro que separa Palestina e Israel, y muestra a un manifestante arrojando un ramo de flores en lugar de un objeto bélico.