De cantar tangos con su padre a ganar un premio Gardel y hacer giras por Europa

Mariana Mazú es licenciada en psicología, psicoanalista y cantante. Hija de padre cantor, Osvaldo Mazú, se crio en O´Higgins, dentro de un hogar lleno de música, con una fuerte impronta del tango y las visitas del reconocido bandoneonista y cantor Rubén Juárez, quien era amigo de su papá. 

Durante la niñez, y de un modo lúdico, comenzó a cantar sus primeros tangos y canciones en su casa junto a familiares y amigos. Así, las fiestas familiares eran las mejores oportunidades para mostrar su talento y disfrutar de la música. 

A los 16 años recibió una Mención Especial por su participación en la categoría Canto, en el marco de los Torneos Juveniles Bonaerenses, donde los músicos Sandra Mihanovich y Adrián Otero fueron jurados.

Luego, a los 17 se mudó a Buenos Aires para estudiar la carrera de Psicología en la Universidad de Buenos Aires y seguir cantando. Sin embargo, la maternidad temprana hizo que se alejara de los escenarios por un tiempo para abocarse a la familia, los estudios y a sostener el hogar. 

Una vez recibida de psicóloga en la UBA y de haber ingresado a trabajar en el sistema de salud, tuvo la sensación de haber llegado a una meta. Pero algo quedaba pendiente.

En 2013, conoció en el bar notable El Faro de Villa Urquiza a Cucuza Castiello, quien la animó a cantar. Y a partir de ese reencuentro con la música, sintió que había llegado el momento de darle al canto un espacio profesional en su vida. 

Así, estudió con Noelia Moncada, Alejandro Guyot y Nora Faiman. Desde aquel momento en que comenzó a profesionalizar su vocación por el canto, diversos acontecimientos la llevaron a alternar sus días entre presentaciones en vivo y su trabajo como psicóloga. 

En 2014 fue telonera de Abel Pintos en el Festival Provincial de la Empanada en O´Higgins y en 2015 participó durante varios meses del programa ‘Laten Corazones’ emitido por Telefé, junto a su hija Morena. 

Luego, realizó shows propios en diversos locales de la ciudad de Buenos Aires, como Café Vinilo, Hasta Trilce, El Faro de Villa Urquiza, El Benny y Lucille, entre otros espacios.

Además, fue invitada a cantar por el grupo Amores Tangos en su show en La Trastienda en octubre de 2018 y participó junto a varios artistas del género en el Festival FACAFF realizado en el Club Atlético Fernández Fierro en 2019.

Finalmente, en el 2020 logró sacar su álbum debut “La bella indiferencia”, producido por Acho Estol, con el cual ganó el premio Gardel a la mejor artista y álbum de tango en 2021.

Ese disco ya cuenta con más de un millón y medio de reproducciones en Spotify.

En abril y mayo de 2022 giró por Europa presentándose en diversos escenarios de España, Italia, Francia, Suiza, Suecia y Noruega; gira que repitió en el año 2023. 

Actualmente se encuentra preparando el material que conformará su próximo disco: “¿Y el fin del amor?” y planea su nueva gira por Europa, que se realizará durante los meses de agosto y septiembre de 2024 y donde la acompañará uno de los guitarristas más importantes del país, Leonardo Andersen, así como también el bandoneonista francés Lysandre

Donoso. Además, el 7 de abril, desde las 20:30 horas, presentará su disco en el emblemático Café Berlín de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. 

Su nuevo corte

“Desencanto” representa el primer corte de su segundo disco, con la participación especial de la cantante Maggie Cullen. Este vals, compuesto por Mariana, pone el acento en el desencanto como generador de nuevos comienzos y aprendizajes.También resalta la importancia de saber esperar el tiempo necesario para encontrar el camino que cada uno desea.

Así, con este primer corte se puede vislumbrar que el amor, y sus diferentes variantes, es el eje y el motor que impulsa este nuevo trabajo que lleva el título “¿Y el fin del amor?”.

El disco, que es producido por Pelu Romero y mezclado y masterizado por Ariel Lavigna (quien trabajó junto a Pedro Aznar y Mercedes Sosa entre otros artistas), verá la luz en marzo. En el mismo se entrelazan nueve canciones que intentan responder a la pregunta siempre abierta sobre el concepto y finalidad del amor.

Entre las influencias musicales de esta ecléctica artista figuran Fito Páez, Serrat, Sabina, El Polaco Goyeneche, María Graña y Rubén Juárez, este último una especie de maestro y faro que solía frecuentar la casa familiar.

Mariana compartió escenario con Cucuza Castiello, a quien la une una gran amistad, y participó como invitada de La Bomba de Tiempo, también con Maggie Cullen, Franco Luciani y con Yamile Burich.