Tal como anticipó Democracia, el 28 de noviembre de 2023, una joven de 28 años se presentó ante la Fiscalía denunciando haber sido víctima de una estafa. Según su declaración, fue contactada por un número con característica internacional + 9, ofreciéndole un empleo en línea que consistía en ingresar a enlaces, realizar pedidos y pagos a través de Mercado Libre a cambio de comisiones.
La comunicación continuó a través de la aplicación Telegram, donde le solicitaron realizar transferencias de dinero para poder seguir operando y cobrar sus supuestas ganancias. La víctima se percató de la estafa después de haber realizado varias transacciones.
La Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Nº 1, bajo la dirección de la agente fiscal Dra. Vanina Lisazo, del Departamento Judicial de Junín, tomó intervención en el caso. Se dispuso la participación de la Sección de Investigaciones en Cibercrimen de Junín, quienes llevaron a cabo un exhaustivo análisis utilizando técnicas de informática forense y OSINT (Investigación de Fuentes Abiertas).
Se inició un minucioso análisis de las redes sociales y tareas de OSINT, enfocándose en rastrear la presencia digital de los sospechosos y obtener información relevante de fuentes abiertas. Esta metodología permitió identificar patrones de comportamiento y posibles conexiones con otros casos similares.
Se realizaron requerimientos a diversas entidades bancarias para obtener información sobre las cuentas destino de las transferencias fraudulentas. Paralelamente, se llevó a cabo un análisis exhaustivo de las direcciones IP de conexión utilizadas durante las transacciones.
A través de estas diligencias, se estableció que la maniobra defraudatoria se originó en la localidad de Bragado, siendo una joven de 19 años la titular de la cuenta y del servicio de internet desde donde se realizaron las conexiones.
Ante estos hallazgos, se solicitó una orden de allanamiento para el domicilio ubicado en el Barrio Complejo de esa vecina ciudad, y el operativo arrojó resultados positivos, con el secuestro de dispositivos móviles, computadoras y anotaciones relacionadas con la actividad delictiva.
La joven fue notificada de la formación de causa penal en su contra, caratulada "Defraudación informática" y la investigación reveló que la chica había sido captada por dos jóvenes, de 21 y 19 años de edad, para utilizar sus datos personales en la apertura de la cuenta bancaria digital.
Se solicitó una nueva orden judicial, emitida por el Juzgado de Garantías Nº 3 del Departamento Judicial de Junín, y ejecutada por personal de la Sección de Investigaciones en Cibercrimen de Junín en conjunto con la División Cibercrimen Interior Norte IV – Bragado y el GTO de la Comisaría de Bragado.
El segundo operativo también resultó positivo, con el secuestro de teléfonos celulares, computadoras y otros elementos de interés para la causa. Los dispositivos y la información recolectada, quedaron vinculados al proceso judicial por la citada "Defraudación informática", proporcionando pruebas clave para desmantelar la organización delictiva.
La colaboración entre las diferentes unidades de Cibercrimen y la aplicación de técnicas avanzadas de informática forense y OSINT resultaron fundamentales para el esclarecimiento de este caso de fraude bancario.
La eficiencia en la recopilación y análisis de datos permitió identificar a los responsables y asegurar la evidencia necesaria para su procesamiento judicial, en la causa que sigue su curso.
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