LE SUELTAN LA MANO AL EXPRESIDENTE

En el kirchnerismo toman distancia y hasta sugieren violencia contra Cristina

El kirchnerismo parlamentario salió ayer tomar distancia de Alberto Fernández, luego de que Fabiola Yañez lo denunciara por violencia de género. Diputados nacionales del bloque de Unión por la Patria presentaron un proyecto de resolución para pedir que se investigue la acusación. 

El proyecto tiene 39 firmas, sobre un total de 99 que integran el bloque. Allí se expresa “la profunda preocupación” por la denuncia de Yañez. Y los firmantes declaran que “corresponde reafirmar nuestra convicción política respecto a que en estos casos siempre le creemos a la víctima”. En el párrafo siguiente, los legisladores exhortan a las autoridades competentes a efectuar “las investigaciones correspondientes, a fin de esclarecer los hechos denunciados y determinar las responsabilidades pertinentes”. 

El proyecto lleva la firma del presidente del bloque, Germán Martínez, y de los legisladores: Mónica Macha, Paula Penacca, Cecilia Moreau, Gisela Marziotta, Julia Strada, Lorena Pokoik, Carlos Castagneto, Luisa Chomiak, Gabriela Estévez, Natalia Zaracho, Micaela Morán, Martín Soria, Constanza Alonso, María Florencia Carignano, Magali Mastaler, Leandro Santoro, Jose Glinski, Sabrina Selva, Ariel Rauschenberger, Juan Marino, Eduardo Toniolli, Vanesa Siley, Marcela Passo, Mónica Litza, Diego Giuliano, Ramiro Gutiérrez, Jorge Neri, Araujo Hernández, Daniel Arroyo, Ana María Ianni, Luciana Potenza, Pablo Todero, Carolina Yutrovic, Andrea Freites, Hilda Aguirre, Luana Volnovich, Blanca Inés Osuna y Eduardo Valdés, este último muy amigo de Alberto. 

Se espera que el grupo junte más firmas de otros diputados de la bancada. “Por el reglamento hay un límite de firmas” reconocían desde el bloque de UP. Pero daban a entender que el proyecto tenía el apoyo de la mayoría. Habrá que creerles. 

En los fundamentos, los legisladores expresan que la iniciativa tiene por objeto que la Cámara “se pronuncie con firmeza ante la gravedad” que implica la denuncia por violencia de género en contra del exprimer mandatario. 

El documento agrega que la lucha contra la violencia por motivos de género constituye “una clara polí tica de Estado en nuestro país”. Tanto es así, recuerda, que “este Congreso Nacional, en el año 2009, sancionó la Ley 26.485 de “Protección Integral para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra Las Mujeres en los Ambitos en que desarrollen sus Relaciones Interpersonales” con el objeto de prevenir y sancionar las distintas y variadas tipologías de violencia”. 

Fue una reacción rápida del sector político del PJ que, en definitiva, fue el que llevó al poder a Alberto, cuando en 2019 fue bendecido como candidato presidencial por Cristina Kirchner. La exvice de Fernández, por cierto, no se ha pronunciado aún públicamente. 

“La indiferencia ante la situación planteada no es una opción en el marco de la agenda de los derechos que el Estado debe garantizar”, agrega el escrito presentado ayer. Y pide que por los argumentos expuestos, “solicitamos a las diputadas y a los diputados que integran esta Honorable Cámara que acompan en con su voto la iniciativa puesta a vuestra consideración”. 

 

Comunicado de la Cámpora 

No fue el único movimiento K. La organización La Cámpora -liderada férreamente por Máximo Kirchnerse solidarizó con Yañez y en forma muy sorpresiva, acaso desconcertante, acusó a Fernández de haber ejercido violencia contra Cristina, aunque sin precisiones. 

La agrupación expresó su “solidaridad” con Fabiola luego de su denuncia. “Te creemos y acompañamos”, manifestó el Frente de Mujeres de La Cámpora a través de un comunicado. “Repudiamos enérgicamente los hechos de violencia machista, provengan de quien provengan, agravados en este caso por el ejercicio de poder que implica el cargo de presidente de la Nación”, abundó. Y luego le apuntaron a Alberto por la supuesta agresión a Cristina. 

“Nos duele y nos subleva que un expresidente banalice y burle banderas, premisas y conquistas que llevamos adelante los feminismos durante estos años. Sabemos que lo personal es político: machismo que se expresó en la vida privada y en la pública. No podemos no remitirnos a la violencia ejercida por él mismo contra Cristina, así como contra mujeres de su entorno cercano a quienes responsabilizó por situaciones que se le cuestionaron públicamente a él”. No ahondaron mucho más en eso. Al parecer no se referían a violencia física. 

Pero también el espacio atacó a la Justicia y a la prensa, que fue la que destapó el caso. Habló de “la doble victimización que ejercieron el Poder Judicial y los medios de comunicación al divulgar información sobre un caso de violencia de género sin la decisión de la mujer involucrada”. 

“Vale más para ellos una operación mediática que la lucha por erradicar la violencia”, concluyó La Cámpora. Es casi un sello, el de buscar otros culpables, de la agrupación que lidera el diputado nacional Kirchner quien, por cierto, no aparece entre los firmantes del texto emanado del bloque de Unión por la Patria.