Macri asumió en el PRO con críticas al Gobierno de Milei
“Es un desafío ayudar a quien no está dispuesto a ser ayudado”, advirtió.
El ex presidente Mauricio Macri protagonizó este jueves 1° de agosto un acto en La Boca que tuvo como objetivo reposicionar al PRO y marcar su independencia en el marco de la alianza con Javier Milei. Al reasumir como titular del partido amarillo, Macri destacó su buena relación con el actual jefe de Estado, pero marcó diferencias y criticó a su entorno: “Es un desafío ayudar a quien no está dispuesto a ser ayudado”, resonó en su discurso.
El acto comenzó pasadas las 17 y había expectativa por el contenido del discurso del fundador del partido. Si bien el PRO y los legisladores que responden políticamente a Macri han sostenido un acompañamiento estratégico para el oficialismo, clave para la sanción de leyes que pidió el Poder Ejecutivo, hay una negativa firme a fusionarse con los libertarios. Por eso, el encuentro de esta tarde tuvo como fin poner distancia.
Marginados, Patricia Bullrich, ex presidenta del partido y candidata a presidenta por ese espacio, y Horacio Rodríguez Larreta, uno de los fundadores del PRO, estuvieron ausentes.
“El equilibrio fiscal tiene que ser de calidad porque es la base en la que se apoya este elemento que moviliza a la sociedad que es la confianza. Por eso no es sostenible recurrir a incumpliento de contratos para alcanzar este objetivo noble del equilibrio fiscal. Hay que llevar al estado al tamaño mínimo para volverlo eficiente y potenciar el crecimiento. Eso es PRO”, afirmó el ex presidente.
Macri buscó darle forma a la relación que aspira con Milei, la de un acompañamiento con diferencias. “El presidente Milei tiene absoluta claridad en la dirección y las ideas, pero hay una debilidad en la capacidad de implementarlas”, sostuvo.
“Los cambios que hay que hacer requieren de una ingeniería que lleva tiempo, y hoy el tiempo pesa. Los argentinos quieren más cambios y más rápido, porque la gente está haciendo sacrificios enormes para respaldar el rumbo económico correcto que tomó la Argentina.
Y reprochó: “Es un desafío ayudar a quien no está dispuesto a ser ayudado (...) lo que tiene el presidente es que lo que pudimos ayudar fue a pesar de su entorno”.