MASSA EN LA MIRA

Para cumplir la meta fiscal el gasto público bajó al 36,5%

Se trata de los propios números del FMI. En 2020, en pandemia, se llegó al récord del 42%. Actualmente, el nivel es el más bajo desde 2012.

El gasto público en la Argentina medido como porcentaje del Producto Bruto Interno (PBI) se ubica en el nivel más bajo de la administración de Alberto Fernández y es equivalente al que había en 2012. 

El dato evidencia los esfuerzos de corrección fiscal que procura llevar adelante el ministro de Economía, Sergio Massa, para mantener los números del Estado dentro de las pautas del déficit fiscal fijadas en el acuerdo firmado con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que se mantienen en el 1,9% del PBI.

Un informe elaborado por el estudio Iván Carrino y Asociados destaca que 2022 cerró con un nivel de gasto público equivalente al 36,5% del PBI, que se ubica 5,6 puntos por debajo del primer año de gestión de Alberto Fernández y del exministro Martín Guzmán, afectado por la pandemia y la cuarentena.

Es el mismo nivel que había hace una década. 

El informe, en rigor, busca determinar si existe alguna relación entre mayor gasto y crecimiento. 

“Desde 2012, el PBI real argentino creció 1,9%, por detrás de todas las economías de la región", dice el informe y añade que "la otra economía que menos creció fue la de Brasil, con un avance de 4,2% acumulado, mientras que la que más creció fue Bolivia, con 37,4% de crecimiento acumulado”.

El techo de gasto de la actual administración fue en 2020, con un 42,1% del PBI, teniendo en cuenta que ese año el Gobierno dispuso un programa muy fuerte de subsidios para que las empresas paradas por efecto de la pandemia pudieran pagar los salarios. 

Del mismo modo se puso en marcha un programa de cobertura para autónomos, independientes y monotributistas.

Luego hubo un ajuste moderado en 2021, cuando se redujo al 40% del PBI en un año electoral, en el que dispuso lo que algunos denominaron como “plan platita”. 

En tanto, el año pasado el mayor peso del achique se produjo a partir del segundo semestre, cuando asumió Massa. En la primera mitad del año el gasto subía a un ritmo insostenible del 12%.

“Es un único caso en el que el gobierno aumenta el gasto después de las elecciones”, planteó recientemente Emmanuel Álvarez Agis, quien fuera viceministro de Economía de Axel Kicillof. El economista dice que, precisamente, como el oficialismo perdió las parlamentarias de 2021, luego cayeron demandas contra el gobierno de sindicatos, gobernadores de provincias y organizaciones sociales, que se fueron silenciando con dinero.

Por otro lado, aunque la oposición plantea la necesidad de la reducción del gasto público, los datos del FMI indican que en 2016 y 2017, los dos primeros años del gobierno de Mauricio Macri, el nivel de gasto estuvo por encima del 40% del PBI.