Alerta en la industria del plástico
Shoppings, hoteles, restaurantes y boliches de la Ciudad de Buenos Aires no podrán ofrecer sorbetes plásticos a sus clientes y en seis meses estará prohibida su utilización y expendio, según una resolución que firmó el gobierno porteño argumentando que el objetivo es reducir la contaminación. Desde la industria plástica salieron a criticar con dureza la medida y alertaron que podría generar un “efecto dominó” que ponga en riesgo a unas 120 empresas de todo el país.
En diálogo con la prensa nacional el gerente de la Cámara Argentina de la Industria Plástica, Sergio Hilbrecht, cuestionó: “Estamos en contra porque otra vez la Ciudad toma un atajo. Les resulta más fácil prohibir que educar al consumidor”.
Hilbrecht sostuvo que los sorbetes, al igual que las jeringas y las tapas de gaseosas, están fabricados con poliestireno, por lo que son reciclables. “No se puede decir que contaminan. Si todos estos postconsumos son tratados adecuadamente se les puede dar un nuevo uso en aplicaciones de varios años”, detalló. Por ejemplo, pueden ser utilizados para la elaboración de muebles y otros objetos.