Club Junín: Trabajo, amor y crecimiento

El Club Junín se mantiene en constante crecimiento. Gracias al trabajo de la comisión directiva y del respaldo de sus tres mil socios, la institución contiene a unos mil jóvenes que participan de las diferentes actividades.
Si bien el básquet es uno de los deportes que más identifica al club, en los últimos años se incorporaron varias disciplinas que han generado una notoria aceptación.
Para conocer más detalles de este camino de constante crecimiento, Democracia dialogó con Jorge Riva, quien ocupa la presidencia desde mayo de 2004 hasta la fecha.

- ¿Cómo nace su vínculo con el club?
- Yo me crié acá a la vuelta, vengo al club desde muy chico. Hice mis amigos acá y pasé muchos momentos maravillosos. El grupo de amigos de mi infancia es de acá, del Club Junín; con ellos y con mi hermano Daniel Riva pasábamos muchas horas acá adentro. Yo tendría seis o siete años cuando empecé a venir, en ese momento me atraía mucho la cancha de básquet abierta y la pileta. Ese fue el comienzo. Hoy estoy cerca de cumplir los sesenta años, tengo tres hijas, dos nietas y otro nieto que viene en camino. Espero que todos puedan seguir disfrutando del club como lo hice yo.

- ¿Qué cree que le puede aportar un club como este a una persona o a una familia?
- Muchas cosas, cuesta un poco explicarlo. Hoy en día el club tiene unos 3000 socios, aproximadamente, pero cuando hay una asamblea vienen 25. Eso me gustaría que cambie, que haya más participación. Personalmente, como ha sido mi caso, creo que uno se acerca a colaborar cuando tiene algún hijo realizando alguna actividad. Eso me parece bárbaro. Pero, sinceramente, me gustaría que haya más colaboración. Hoy en día, el voley y la natación generan mucha participación de los padres pero me gustaría que eso se extienda a todos los deportes y actividades que realizamos.  

- ¿Qué aspectos de la historia le gustaría resaltar?
- Yo siempre digo que este club se fundó dos veces. Porque antes de la fundación original, de la que festejamos todos los años, el club era netamente de fútbol y se llamaba Junín Fútbol Club. Donde hoy está la plaza Marcilla, antes había una cancha de fútbol. Después se unió con Defensa y después se dividieron. El club se va de la Liga Deportiva del Oeste y ahí la Municipalidad abre la calle y en la cancha de fútbol se hace una plaza. Entonces ese Junín Fútbol Club pasa a llamarse Club Junín y el acta fundacional tiene la fecha de 21 de diciembre de 1921.

- Pasemos a la actualidad, ¿cómo está el club hoy?
- Bien, por suerte no tenemos problemas económicos. En el grupo que conformamos la comisión se está trabajando bien y, como ya te dije, la idea siempre es lograr mayor participación. En los últimos años se han hecho cosas muy importantes, como fue en el año 2000 la inauguración del natatorio climatizado. Creo que eso cambió mucho la realidad del club. De noviembre a abril es la temporada de verano y de principios de mayo hasta octubre es la de invierno. Hacemos un gran esfuerzo en el mantenimiento pero vale la pena porque vemos que es importantísimo para la vida social. Por ejemplo, en los torneos zonales vemos que hay entre 400 y 500 personas y eso nos genera mucho orgullo.

- El natatorio ha sido la gran obra de este último tiempo.
- Sin lugar a dudas. Es algo que nos enorgullece. Cuando organizamos algún torneo siempre tenemos el apoyo de la Municipalidad, eso es algo que también tenemos que destacar. Es un ida y vuelta. De nuestra parte ofrecemos el natatorio para actividades importantes; ahora nos pidieron el lugar los bomberos voluntarios para hacer una capacitación. El lugar también es utilizado sin costo por algunos deportistas que se destacan a nivel nacional, por alumnos de las escuelas especiales y también estamos por restablecer un convenio con PAMI para que pueden venir los abuelos.  

- Además de la función social, ¿cuáles son los objetivos deportivos?
- Siempre tenemos representación en Junín y en torneos que trascienden, sea en tenis, voley o básquet o cualquiera de las disciplinas. Entre los proyectos que tenemos más inmediatos, está la idea de participar con el equipo de básquet en el torneo federal. Los jugadores vienen realizando un gran trabajo, van dos años consecutivos que llegan a la final y eso nos ha llevado a pensar en esta participación. Esto sería en los próximos meses, nos estamos organizando, sobre todo en el aspecto económico, porque sabemos que son viajes largos.

- ¿Qué lo motiva a seguir trabajando?
- El sentido de pertenencia, haberme criado en este lugar, haber venido con mis hijas y en un futuro espero ver a mis nietas. Todo eso me genera cosas buenas. Cuando al club lo mamaste desde chico, todo se hace más fácil. No me pesa venir. Sé que tiene que haber una renovación y sé que en ese aspecto no estamos como quisiéramos, pero mientras tanto el club está abierto para todos. Tengo el respaldo de mi familia y del resto de la comisión, esas dos cosas son claves. Después, algo que suele ocurrir, es que al dirigente se le remarca más lo malo que lo bueno. Pero sabemos que es así. Uno encuentra la satisfacción sabiendo que está haciendo algo para el club donde se crió. Omar Valdez, una gloria de esta institución, una vez dijo que el Club Junín era el patio de su casa. Yo siento eso. Para mí es un gran orgullo ser el presidente del Club Junín.