Ya hay tres casos sospechosos de dengue en la Región Sanitaria III
Si bien se aguardan resultados de laboratorio, desde el área se insiste en los cuidados para evitar focos que favorezcan la proliferación del mosquito transmisor de la enfermedad. En el país dieron positivo un total de 748.
Según los últimos datos informados, en la provincia de Buenos Aires se confirmaron 152 casos de dengue de los cuales el 77 por ciento corresponde a personas que habían viajado a Bolivia, Colombia, Misiones, Formosa y Salta antes de comenzar con los síntomas.
En nuestra región, días atrás, un vecino de Baigorrita fue internado en el HIGA con un caso sospechado que se suma a otros dos informados en el Boletín Epidemiológico, según indicó a Democracia el Dr. Jorge Herce, director de la Región Sanitaria III.
Lo cierto es que el dengue ya circula en 15 provincias, entre casos autóctonos e importados y desde el 31 de enero se registraron 4089 casos con sospecha de dengue u otros arbovirus en el país, de los cuales 748 resultaron confirmados.
Casos “sospechosos”
La situación en cuanto a casos de dengue, al menos los que han habido en la Región “son todavía sospechosos, no hay confirmación”, aseguró el doctor Herce.
“Tardan unos días en confirmarse los laboratorios. Pero uno, teniendo en cuenta que en todos los casos han sido personas que han venido de zonas donde circula el virus, hay altas sospechas de que sean positivos”.
“En ese aspecto, los municipios se han encargado de llevar a cabo las medidas de prevención puntuales en esos casos, que son aquellos que tienen que ver con la vivienda de la persona que tiene la enfermedad, las manzanas que la rodean, vigilar esas cuestiones, el descacharrado de objetos que junten agua, la fumigación (si bien solo elimina los mosquitos adultos, no los huevos ni larvas)”, indicó.
“Hasta el último boletín había tres casos sospechosos en la región sanitaria”, adelantó.
En el plano del territorio bonaerense, Herce indicó que la situación es de muchos casos: “la mayoría, sobre todo en esta época de flujo de gente de lugares como Brasil y Paraguay, donde hay importantes epidemias. Hay muchísimos casos en el norte argentino así que estamos en una situación de riesgo porque en toda la región hay mosquitos. Hay aedes desde hace muchos años y es una combinación peligrosa”.
Cabe recordar que el contagio es a través del mosquito, es decir tiene que haber alguien enfermo, el mosquito que lo pique y luego picar a alguien sano.
Insistir en la prevención
Herce hizo fuerte hincapié en la prevención y los cuidados que cada uno debe tener para evitar la propagación del dengue.
“Se insiste y se trabaja en los municipios en lo que tiene que ver con la prevención, vinculados a donde crece el mosquito. Todos aquellos lugares, recipientes, objetos que junten agua, allí se cría el mosquito, pone los huevos, entonces la consigna de que si no hay mosquito no hay dengue, es absolutamente cierta”, explica.
“La principal prevención del dengue es eso: tratar de cuidar nuestros patios, incluso vigilar los lugares públicos donde se pueda acumular agua; de una tapita de gaseosa hasta una pileta. Son cosas que uno debe mantener adecuadamente limpias, vacías, dar vuelta los recipientes donde uno le da agua a las mascotas, donde se puede acumular agua porque son lugares donde el mosquito pone los huevos y donde se desarrolla”.
Ante la sospecha, la precaución
Consultado sobre los brotes de años anteriores, Herce destacó que “el año pasado hubo muchísimos casos”, y que “en 2016 hubo un brote mucho más grande pero no tuvo difusión en absoluto”.
Advirtió que “Brasil tiene la epidemia más grande de los últimos años” y que “hay que tener precauciones si uno viaja al norte, protección para evitar las picaduras. Recordemos también que el primer episodio de dengue no es severo, puede ser leve, pero el segundo si puede ser muy grave”.
Sobre los síntomas, recordó que “produce fiebre alta, dolores musculares, dolor de cabeza detrás de los ojos y brotes en la piel”. Además, el caso se confirma con dos muestras y luego se hace el diagnóstico.
“La sospecha en este tipo de enfermedad vale para que todos tomemos las precauciones para controlarla, y se debe entender que depende básicamente de la colaboración de los ciudadanos. Si no colaboramos, ninguna institución lo puede resolver porque pasa mucho por nuestra conducta”, aseguró.