TRASTIENDA POLÍTICA

Intendentes del PJ se agrupan para “porotear” candidaturas con los delegados de Cristina

Después del anuncio de que Cristina Kirchner no estará al frente de la boleta electoral del peronismo, el PJ bonaerense -que encarnan, sobre todo, los intendentes del Conurbano- apuró movimientos para procurar protagonismo en la fórmula provincial que disputará la gobernación.
En ese contexto se inscribe la reunión de ayer en Cañuelas, que juntó a intendentes de toda la Provincia y de la que salió una suerte de mandato para que una comisión representativa negocie políticamente con el cristinismo puro, un espacio que viene dando señales de apetencia por los cargos más importantes que se pondrán en disputa.
Los jefes comunales justicialistas no alcanzan a dilucidar todavía qué hará Cristina respecto a la Provincia: si bajará a ella la línea de moderación que supone el dedazo que favoreció a Alberto Fernández a nivel nacional con la candidatura presidencial o si, por el contrario, la estrategia pasará por intentar que su tropa fiel -que no reconoce terminal en lalogia de intendentes- cope los lugares disponibles en las boletas bonaerenses, lo que generaría una cierta tensión en el partido.
El dato es clave. Se sabe que los intendentes del Conurbano han venido trabajando fuertemente para aunar fuerzas y pujar por colocar al candidato a gobernador, a la hora de la negociación política con la ex presidenta. Quieren que sea uno de ellos.
Un grupo grande venía impulsando al lómense Martín Insaurralde. Otros, acaso de menor densidad política, viene empujando a Verónica Magario, que gobierna La Matanza. Probablemente el distrito donde mejor mide Cristina. La postulación de Magario tiene el respaldo fuerte, además, de unos quince intendentes del interior provincial.
Aquel primer grupo protagonizó el muy comentado asado del viernes pasado con Alberto F, antes de que éste fuera bendecido por CFK. Ya se comentó en este diario: el hombre no dijo allí una palabra a pesar de que ya sabía la noticia. El sábado, luego del video confirmatorio de Cristina, uno de los asistentes le comentó a este cronista que ahora sí entendía perfectamente porqué Alberto estaba especialmente entusiasmado, bastoneando la reunión y hablando todo el tiempo de convocar a más sectores.
Detalles interesantes: el primero es que la comida iba a ser sólo con Fernández, en su calidad de regresado consejero cristinista, pero éste llegó con Máximo Kirchner, que se lleva bien con los intendentes; el segundo es que sería algo reservadísimo, pero se acordó publicar una foto. ¿Mensaje para la matancera Magario y su socio político Fernando Espinoza?
Comentan que en La Matanza molestó un poquito pero, rápido de reflejos, Espinoza se desvivió en elogios twitteros apenas supo lo de Fernández.
En aquel encuentro, a todos le quedó claro que la dupla presidencial Fernández-Fernández designó a Máximo, el jefe absoluto de La Cámpora, como el armador político en Buenos Aires. La reunión de ayer en Cañuelas apuntó, precisamente, a empoderar a un grupo de delegados para que vaya a “porotear” con él la integración de las listas secciónales y distritales de la Provincia que presentará el peronismo y la cuestión central de la fórmula a la gobernación.
Que Máximo sea el delegado de su madre y de Fernández abrió aquellas dudas iniciales respecto a qué línea se seguirá en la Provincia: se sabe que Axel Kicillof venía siendo la carta fuerte que insinuaba CFK pero, en rigor, eso no le cae bien a los intendentes, que lo ven como un extranjero en Buenos Aires.
La mencionada foto con el ahora pre candidato presidencial abrió cierta esperanza en algunos alcaldes respecto a que el Instituto Patria terminará resignando el número uno de la fórmula a la gobernación e irá por la vice. Sería algo así como una reiteración del esquema nacional. Algo que aceptarían con gusto los intendentes.
Por otro lado, muchos creen que la opción de Kicillof a la gobernación podría terminar diluyéndose, no porque no mida bien sino porque a sectores kirchneristas les gustaría verlo en el ministerio de Economía nacional de un futuro gobierno K. Abonan esta tesis sus recientes viajes a Washington para explicar que, llegado el caso, habrá “sensatez”.
Sin embargo, quienes conocen a Alberto F. aseguran que, en el caso de ser presidente, el hombre se inclinaría por un ministro de perfil más centrista y que no genere resquemores en el mundo financiero internacional.
Puertas adentro del gobierno provincial, las encuestas que manejan los macristas dicen que Kicillof sería el candidato más competitivo contra María Eugenia Vidal. El economista cuenta con un alto nivel de conocimiento y todos los focus groups arrojan que tiene una alta identificación con Cristina.
Es, justamente, contra lo que deben pelear los intendentes peronistas para quedarse con la cabeza de la fórmula bonaerense del justicialismo.