Huerta orgánica para chicos en el barrio Villa Talleres

Martín Zunino y Marisol Rachid forman parte de la ONG Pensar Junín y fueron quienes idearon este proyecto para que los niños y jóvenes puedan estar en contacto con la tierra, aprendiendo a cultivar al tiempo que conocen las plantas.
Cuenta Marisol que se acercaron a “la institución con ideas y proyectos; propusimos llevar a cabo la huerta orgánica y así fue como empezamos a trabajar en este patio y, a lo largo del tiempo, empezó a tomar forma”. Así nació “El Patio del Vecino”.
El nombre se debe a que un vecino del lugar tenía el fondo de su casa sin uso y ellos se lo pidieron prestado con la propuesta de la huerta y le pareció interesante: “Rompimos la pared y así pasamos al patio del vecino”, comenta entre risas Marisol. 
La idea empezó a tomar color y, con el tiempo, surgió este proyecto “por los resultados que dieron señales que esto era algo que causaba efectos positivos en todo lo que tiene que ver con la manipulación y con el contacto con la tierra y también lo que se genera con el otro: la sociabilización y después todo lo que puede volcar uno en la naturaleza”, comenta Marisol. Además, asegura que “junto con Martín tratamos de poder expresarlo y, en algún punto, sembrar esa semillita que, cuidándola, va dando frutos”.
Por otro lado, también es un espacio recreativo y educativo para la “gente que va buscando un lugar de encuentro y así se abren los talleres”. “Acá vienen chicos del barrio que los mismos van trasladando información a los más pequeños a quienes se les enseña se divierten juegan y aprenden”, cuenta Martín, y agrega que “acá no se les da órdenes a los chicos sino que cada uno tiene sus actividades”
Además de la tierra, la ONG enseña a los chicos la realización de tareas y elaboración de productos como entretenimiento. “Arrancaron amasando el pan y después pasamos a las actividades de la huerta, reconocimiento de plantas y especias y los chicos se van conformes”, destaca Martín.
En la actualidad “La Casita Ecológica” cuenta con decenas de chicos que pasan tiempo aprendiendo sobre la diversidad de plantas. “Hace muy poquito arrancamos con las colonias de verano para hacer una jornada de huerta y panificados para la ONG”, finaliza Martín.