La lucha en Sudán resurgió después del anochecer a pesar del alto el fuego

Los combates estallaron de nuevo en Sudán el martes por la noche a pesar de una declaración de alto el fuego por parte de las facciones en conflicto cuando más personas huyeron de la capital, Jartum.

Un alto el fuego de 72 horas pactado entre los dos generales que se disputan el poder en Sudán entró en vigor y fue violado ayer tras 10 días de combates que provocaron 450 muertos y un éxodo masivo de extranjeros, que continuaba al amparo de la tregua.

En Jartum, la capital sudanesa, de 5 millones de habitantes, no se escuchaban ráfagas, disparos ni explosiones casi por primera vez desde el inicio de los combates, el 15 de abril, dijeron medios internacionales y locales.Pero por la noche volvieron los ataques cruzados.

El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, anunció el alto el fuego de 72 horas y que había sido acordado por el jefe del Ejército, Abdel Fatah al-Burhan, y del grupo paramilitar Fuerzas de Respuesta Rápida (FAR), Mohamed Hamdan Daglo.

Ambos generales dieron un golpe de Estado en 2021 contra el Gobierno civil surgido tras el derrocamiento del expresidente autocrático Omar al-Bashir.