Investigan la detención de estudiantes en Francia
Un video muestra cómo la policía detiene a los adolescentes a las afueras de la capital en una imagen que el ministro de Educación calificó como “forzosamente chocante”.
En un clima tan tenso como el que se respira en Francia en vísperas de una potencial nueva jornada de protestas violentas del movimiento de los chalecos amarillos en París y otras grandes urbes, parapetadas y en máximo estado de alerta, la consigna principal era no calentar más aún los ánimos. Un propósito que se vino abajo con la difusión masiva este viernes de las imágenes del arresto, el jueves en las afueras de París, de más de un centenar de adolescentes cerca de un liceo, con la mochila escolar aún a la espalda, obligados a permanecer de rodillas sobre el suelo embarrado y con las manos a la cabeza, rodeados de agentes armados.
Aunque el Gobierno ha reconocido que se trata de imágenes “chocantes”, como dijo el ministro de Educación, Jean-Michel Blanquer, ha defendido la actuación policial en un contexto de “violencia urbana”. No obstante, la difusión del video ha provocado fuertes críticas y la apertura de varias investigaciones sobre los hechos, mientras miles de estudiantes se lanzaban de nuevo a la calle, protagonizando de nuevo algunas escenas violentas.
En el video del arresto de unos 150 adolescentes en Mantes-la-Jolie, a 57 kilómetros de París, se puede escuchar una voz que, con sorna, dice a los jóvenes, que permanecen callados y serios: “Esto sí que es una clase obediente”.
Según subrayó el ministro del Interior, Christophe Castaner este viernes en una comparecencia ante la prensa, en los últimos días, en Mantes-la-Jolie, en la comuna de Yvelines, se han registrado numerosos actos de violencia y se constató la suma a las protestas de los liceos de “un centenar de enmascarados armados con palos y artefactos incendiarios, con la firme intención de enfrentarse a las fuerzas del orden” y que protagonizaron “saqueos” y ataques a automovilistas.
Esa es la situación con la que se encontraron, explicó Castaner, los 12 policías que tuvieron que arrestar a los más de 150 adolescentes, motivo por el que procedieron de la forma que lo hicieron, obligándoles a arrodillarse con las manos en alto -“un procedimiento clásico”, afirmó- para evitar que huyeran antes de ser llevados a comisaría.
También el Defensor de los Derechos, Jacques Toubon, anunció la apertura de otra investigación “sobre las condiciones en que se desarrollaron las detenciones de los estudiantes”.
Miles de estudiantes marcharon este viernes por París hasta la plaza de la República donde protestaron por las imágenes de Mantes-la-Jolie emulando a los adolescentes detenidos y colocándose de rodillas y con las manos sobre la nuca.