Elevaron a 70 los muertos por el volcán de Guatemala
Tres departamentos fueron declarados en Estado de Calamidad para viabilizar fondos que sirvan en la compra de insumos para las búsquedas.
Las autoridades de protección civil de Guatemala elevaron ayer a 70 la cifra de muertos por la erupción del volcán de Fuego, situado a unos 50 kilómetros de la capital guatemalteca. La última víctima mortal confirmada ha sido la de un niño que había sido trasladado al Hospital San Juan de Dios por graves quemaduras. Portavoces del Hospital Roosevelt, también en la ciudad, dijeron que allí se atiende a 19 personas afectadas por la erupción, 9 de ellos menores de edad, algunos en estado crítico.
El portavoz de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres, David de León, sostuvo que se mantiene el dato de 46 personas heridas y la cifra de desaparecidos sigue siendo incierta, sin embargo aumentó la cantidad de albergadas a 1.877, en los distintos centros situados en los departamentos más afectados: Sacatepéquez, Escuintla y Chimaltenango.
Estos tres departamentos fueron declarados en Estado de Calamidad por el Organismo Legislativo, lo que permitirá al Gobierno central realizar labores de rescate y recuperación de la zona afectada. Dicho Estado de emergencia, que entrará en vigor este martes, contará con un plazo de 30 días, según lo acordado por los diputados y permitirá la adquisición de bienes y servicios, además de la supervisión de obras, para lo cual el Ejecutivo deberá enviar un informe circunstanciado al Parlamento, y cuyos gastos serán fiscalizados por la Contraloría General de Cuentas.
Adicionalmente, el Legislativo otorgó un fondo de atención para los niños huérfanos y a los afectados por las quemaduras, por un monto de 10 millones de quetzales (1,33 millones de dólares) disponibles para la Procuraduría General de la Nación y la Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia.
De León añadió que han sido evacuados 3.271 vecinos de las faldas del coloso, que este domingo hizo estallar su cráter, lanzando un flujo piroclástico -arena, cenizas y humo con lava- a más de 1.500 metros. Los afectados por la erupción y las cenizas, que abarcaron más de 260 kilómetros a la redonda, suman más de 1,7 millones de personas. Además, detalló que las lluvias que se esperaban ayer en el coloso dificultaban la búsqueda de desaparecidos.