Movilización gremial en septiembre del 2023 contra el Impuesto a las Ganancias.
Movilización gremial en septiembre del 2023 contra el Impuesto a las Ganancias.
POSIBLE REIMPLANTACIÓN POR PARTE DEL GOBIERNO NACIONAL

Gremios en alerta ante la nueva aplicación del Impuesto a las Ganancias a salarios

Algunos representantes de gremios locales proponen que, si se implementa, lo deberían pagar las empresas y no los trabajadores. Otros señalan que es una forma de chantajear a los gobernadores que reclaman más recursos para sus provincias.

Continúa la incertidumbre respecto a cuál va a ser el nuevo piso para pagar el impuesto a las Ganancias que proyecta el Gobierno nacional y que afectaría a los salarios elevados.

La falta de precisiones sobre varios artículos de la iniciativa hace que por ahora la misma siga siendo un borrador.

Por su parte el ministro del Interior, Guillermo Francos, aseguró que el nuevo piso para pagar el impuesto estaría entre $1.500.000 y $2.000.000, siempre apuntando que era un tema fiscal de trascendencia para las provincias, y que el ministro de Economía y su equipo estarían terminando de analizar.

En tanto los gremios a nivel nacional y local continúan en alerta, siempre con la postura de que el salario no es ganancia, por lo cual no deberían cobrarle a los trabajadores el Impuesto a las Ganancias. Así lo aseguraron en el orden local varios dirigentes sindicales.

En diálogo con Democracia, Eduardo Donatelli, secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros de Junín (SOEA), manifestó que la lucha de su sector contra la aplicación de este impuesto viene de hace años atrás.

“Nuestro reclamo – explicó el entrevistado- viene desde hace bastante tiempo. Hicimos la presentación en noviembre del 2021, para hacer la excepción de algunos de los adicionales de aceiteros. El trabajador de nuestro rubro trabaja los fines de semana, en horario nocturno, durante los feriados por las Fiestas y demás, es decir, muchos adicionales que a un trabajador les generaba una mejora en su salario y, por ello, se veían afectados por el impuesto a las ganancias”. 

“Desde nuestra actividad se consiguió, anteriormente a la eliminación de este impuesto, que algunos adicionales no fueran afectados por el Impuesto a las Ganancias a fines del 2022, principios del 2023”, recordó.

El dirigente reiteró que estaban en contra del impuesto e iban a iniciar las medidas de fuerza que correspondieran, si esto se implementara otra vez. “No estamos dispuestos a que al salario se lo tome como Ganancia”, afirmó.

“Si se implementa, que lo paguen las empresas”

Continuando con este tema, Donatelli advirtió que “ante la implementación de este impuesto y si es como se anuncia, si se hace en forma retroactiva también, vamos a iniciar acciones conjuntamente con la actividad, con la Federación Aceitera”.

“Nos pondremos en sintonía tanto con el Sindicato de San Lorenzo como con la Federación Aceitera llevando al frente cualquier tipo de reclamo para que esto no se implemente. Y si se implementa, que lo paguen las empresas. Nosotros no vamos a dejar que el salario aceitero se vea afectado en un contexto inflacionario constante, como también se da en la suba de medicamentos y alimentos, entre otros”, dijo. 

“No vamos a actuar tan pasivamente esta vez con este tema. Si se implementa otra vez y no hay acuerdo con las empresas para que absorban este impuesto y no afecte a sus empleados, vamos a iniciar las medidas de fuerza que correspondan”, advirtió Donatelli.

Tras afirmar nuevamente que el “salario no era ganancia”, señaló que “ante un gobierno que pretende avasallar los derechos de los trabajadores”, no iban a permitir que se avanzara con ese tema.

“Es un chantaje a los gobernadores”

Por su parte, Héctor Azil, de Asociación Trabajadores de la Sanidad Argentina (ATSA), Filial Junín, al ser consultado por la intención del Gobierno nacional de aplicar este impuesto a asalariados que actualmente no estaban afectados, manifestó que al ser un impuesto anualizado y que los pisos de Ganancia se revisarían cada tres meses, dada el alza inflacionaria impactaría también en los salarios de trabajadores de la sanidad.

“Es una disminución más del salario, que viene acompañada por la inflación, el incremento de precio de los productos, la escolaridad, los alquileres, las tasas, los impuestos, los servicios y tarifas de luz y de gas. Es toda una cadena de situaciones que lleva al empobrecimiento de los trabajadores en general”, aseguró Azil a Democracia.

Respecto a la desinformación que había sobre este tema, Azil consideró que era un chantaje del Gobierno nacional hacia los gobernadores, de cara a la sociedad. “Les cerró la canilla de los recursos y estamos viendo las reuniones, vemos que entran y salen, negociando el DNU y la Ley Ómnibus, a cambio de empezar a darles algunos recursos a los gobernadores, que en definitiva es para los pueblos de las provincias. Es una situación muy grave. En otro contexto estarían todos clamando por lo que está pasando. Pero, bueno, parece que a este gobierno se le tolera mucho más que a otros”, mencionó.

“Tiran propuestas para ver las repercusiones”

Abel Bueno, dirigente de La Bancaria de Junín, aseguró que desde su gremio estaban totalmente en desacuerdo con la implementación de cualquier impuesto al salario.

Respecto a la desinformación sobre el tema Ganancias, Bueno opinó que eran versiones que se “tiraban” a través de los medios para ver las repercusiones.

“Algunos dicen una cosa y otros, otra cosa. Aparentemente a los presidentes de los bloques les dieron un proyecto que no es el mismo que les dieron a los gobernadores. Quieren bajar el piso a un millón y monedas, cobrar retroactivo al último trimestre, pero no hay nada concreto ni real sobre qué es lo que quieren hacer. Para mí, están tirando propuestas para ver  las repercusiones”, opinó Bueno al ser consultado por Democracia.

“Desde siempre los gremios estamos en contra del cobro del Impuesto a las Ganancias y de cualquier impuesto que afecte a los salarios de trabajadores. Incluso hemos hecho paro (en otros años), porque creemos que el salario no es ganancia. Era brutal el descuento que se hacía, la forma de hacer los descuentos y los cálculos que se utilizaban. Ahora no hay un anteproyecto de ley sino varios que han ´tirado´ desde el mismo gobierno”, dijo Bueno.  

El proyecto oficial

Ayer se conocieron precisiones del ministro del Interior, Guillermo Francos, sobre el nuevo piso para cobrar el Impuesto a las Ganancias que proyectaba el Gobierno. Al respecto, el titular del Interior dijo que lo está “terminando de analizar el ministro de Economía” en función de la meta de déficit cero y aclaró que no habrá retroactividad, mientras se demoraba una semana más el texto final de la Ley Ómnibus.

Habló de que el nuevo piso para pagar el impuesto a las Ganancias que proyecta el gobierno estaría entre $1.500.000 y $2.000.000, siendo este un tema fiscal de trascendencia para las provincias que está “terminando de analizar el ministro de Economía con su equipo”.

“Va a estar entre esos números”, manifestó Francos en declaraciones radicales. Además, dejó en claro que las escalas serán “progresivas” y que ambas cuestiones tuvieron buena recepción de los gobernadores de Juntos por el Cambio que se reunieron días atrás junto al ministro del Interior y otros funcionarios de la Casa Rosada.

Por otra parte, resaltó que no habrá ningún tipo de retroactividad en caso de avanzar en el Congreso. “La ley no es retroactiva al primer trimestre o cuatrimestre. Lo mismo con el último trimestre del año pasado, que quedaría por fuera de la ley. Lo vamos a corregir y todo eso quedará exento de Ganancias”, anunció.

A pesar de las declaraciones de Francos y del “apoyo” que ofrecieron los mandatarios del ahora ex Juntos por el Cambio, en los despachos de Diputados y del Senado la incertidumbre se elevó en los últimos días debido a la falta de precisiones sobre varios artículos de la iniciativa de Bases que, hasta ayer, continuaba como borrador.

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