Destacan trabajo de investigador juninense en una publicación internacional de eLife
El trabajo publicado es parte esencial de la Tesis Doctoral en Biología de Sistemas de Emanuel Cura Costa, becado por Conicet, que se llevó a cabo en el Instituto de Física de Líquidos y Sistemas Biológicos, dependiente de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP).
Emanuel Cura Costa, licenciado en Biotecnología y Biología Molecular, es uno de los autores de un trabajo tecnológico publicado en la revista internacional eLife, referido a la regeneración de la médula espinal del axolote, una salamandra que tiene células capaces de reproducir terminaciones nerviosas de su cuerpo.
El trabajo es parte esencial de la tesis doctoral en Biología en Sistemas de Emanuel, becado por Conicet y dirigido por el doctor Osvaldo Chara, que se llevó a cabo en el Instituto de Física de Líquidos y Sistemas Biológicos (IFLySiB) dependiente de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP).
De Junín
Emanuel, de 32 años de edad, proviene de una familia juninense. Hijo de Karina Costa y Marcelo Cura, y hermano de Felicitas, recordó cómo nació en él la pasión por la biología molecular, y para eso se remontó a su paso por el Colegio Marianista, cuando dos de sus profesores, Fernanda Pesciallo (Biología) y Gustavo López (Física) sembraron en él la semilla del interés por la Ciencia.
“Me vine a estudiar a La Plata, con dos amigos, y me gustaba estudiar Biología. A medida que fui avanzando en la carrera me empezaron a dar curiosidad otras cosas, más allá de la Biología. Y ahí apareció la Física, la Computación, entonces cuando me recibí de Licenciado en Biotecnología y Tecnología Biomolecular, decidí estudiar un doctorado y estudiar Biofísica”, explicó durante la entrevista en TeleJunín Noticias.
“Ese doctorado, ese trabajo, que fue de casi 6 años, cristalizó en este trabajo publicado el miércoles 16 de junio en la revista internacional eLife, referido a la regeneración de la médula espinal en el axolote”, dijo.
El axolote
Al respecto, Emanuel Cura Costa explicó: “Lo más sorprendente del axolote es su capacidad regenerativa: cuando pierde la cola, una extremidad o un brazo, incluso parte del corazón y del cerebro, es capaz de regenerarlo y esto es más que sorprendente teniendo en cuenta que es un vertebrado”.
“Regenera partes de su cuerpo que tienen huesos, sistema nervioso, médula espinal, lo cual es sorprendente. Nosotros, los humanos, no tenemos esa capacidad y de ahí radica el interés médico de estudiar a los axolotes, porque quizá si logramos comprender por qué ellos pueden regenerar una mano cuando la pierden, por qué los humanos no. Si logramos comprender eso, que es ciencia básica, la que hago yo, después se podría hacer Ciencia Aplicada y, finalmente, aplicar eso en Medicina Regenerativa en un futuro si es posible. Ese es el camino”, delineó.
Según lo expuesto, su tesis fue enfocada en la médula espinal. “Es una estructura a continuación del cerebro, parte del sistema nervioso central y va todo a través de la columna nuestra por adentro de las vértebras. Eso se encarga de controlar todo lo que es la interacción nuestra con el entorno. Si uno toca y siente calor, o frío, cuando lo mueve. Hay gente que tiene un accidente de tránsito y tiene una lesión a nivel de la médula espinal y no puede mover los miembros después”, apuntó.
“Este camino empezado podría ser el camino de la Medicina Regenerativa, que en un futuro logre reparar esos daños”, destacó.
Tecnología
Tras aclarar que él no trabaja directamente con los animales, en este caso el axolote, Emanuel explicó que él hizo un modelo matemático- computacional de la médula espinal del axolote, conformada por representaciones de las células que pueden dividir, entonces cuando se dividen hacen que la cola del animal crezca.
En este punto, es preciso destacar que se usó, por primera vez, este modelado matemático-computacional para simular la médula espinal del axolote y se logró comprender el patrón espacio-temporal que subyace a la proliferación de las células ependimarias responsables de la regeneración. Además se adaptó, también por primera vez, la técnica Fucci a estos animales, permitiendo visualizar los ciclos celulares de las células ependimarias in vivo, y confirmando las predicciones realizadas por las simulaciones.
El trabajo
Para explicar cómo se llegó al trabajo realizado por él, dijo que en unos estudios hechos en Alemania, por un grupo que colabora con el grupo de investigación que él integra, notaban que cuando ellos le amputaban la cola al animal esta se regeneraba.
“Nosotros notábamos que muy cerca del corte, a un milímetro, a partir del día 4, empezaba a pasar algo distinto: las células empezaban a dividirse más rápido y obviamente la cola crecía más rápido. Pero lo que no sabíamos era qué pasaba antes del día 4, no sabíamos qué estaba haciendo cada una de esas células y eso fue lo que traté de develar con mi modelo matemático”, manifestó.
“Fue emocionante ver, junto con mi director, que el modelo funcionaba, nos estaba dando lo que los experimentos habían medido en otros trabajos. Nuestro modelo podía reproducir la realidad, la naturaleza de la médula espinal del animal. Para nosotros fue una gran sorpresa a tal punto que ni lo creíamos. Nos abrazamos, festejamos y mandamos el trabajo a publicar en esta misma revista. Nos aceptó el trabajo, nos hizo algunos comentarios y en el interin, cuando ya estábamos por terminar y publicar el trabajo, mi director le cuenta al grupo que estaban en Alemania y que ahora están en Viena, Austria, los resultados de mi trabajo y unas predicciones que yo había hecho, que eran muy ambiciosas. Preguntamos a nuestro modelo y respondió, que es lo que en la imagen de computadora se ve en colores. A las células que les falta poco para dividir, se ven rosas, y si les falta más, verde. Por eso, en la punta de la cola, se ven más células rosas porque dividen más rápidos ahí, son las células que se encargan de regenerar la cola”, dijo.
“Cuando le muestran nuestro trabajo al grupo que ahora está en Viena, justo llegó un investigador que se llama Leo Otsuki que venía trabajando en la mosca de la fruta, por primera vez puso la técnica de Fuzzi, que permite ver con colores, en el axolote. Cuando ellos hacen el experimento para ver si nuestras predicciones eran correctas se encuentran con que sí, eran correctas, tenían lo que nosotros habíamos dicho que iba a pasar. Esto fue un año de trabajo, que se sumó a lo que ya habíamos mandado a publicar”, apuntó.
Regeneración
Ante la acotación que en el humano hay órganos como el hígado o la piel que se regeneran, Emanuel Cura Costa señaló que dependía del tejido.
“Se escucha mucho que las neuronas no se dividen, que una vez que las perdés, las perdés. Bueno, no es tan así, pero sí es cierto que el Sistema Nervioso, cuanto más especializada está la célula, menos posibilidades de dividir tiene. No es el caso del axolote que tiene estas células que tienen origen nervioso en la médula espinal y que, sin embargo, son capaces de ser la punta de lanza de la regeneración de la cola. Entonces ahí vamos, para entender por qué. No hay muchas diferencias evolutivas, es una médula espinal dentro de vertebras igual que nosotros”, señaló.
Saludos
Emanuel Cura Costa, al término de la nota en la que tan bien explicó este avance de la Tecnología y la Matemática aplicada a la Biología, saludó muy especialmente a sus abuelas Beli y Chiquita, y a su abuelo Jorge, quienes seguramente ya están orgullosos de él. También saludó a Silvi Rinaldi, quien según destacó los llevaba a las compus del entonces Cibergamo cuando eran chicos, y a “mis viejos, que los amo”, dijo emocionado el joven juninense durante su entrevista con TeleJunín.