Negro... y algo más

El negro nunca pasa de moda. Es el color por excelencia, el  tono que se convierte en el protagonista de nuestro armario cuando queremos resaltar una ocasión especial con un modelo que enmarque nuestra figura de manera más esbelta.
Es el color que se combina de manera más sencilla con cualquier tipo de accesorios y con cualquier detalle que queramos resaltar. Nunca nadie se fijará más en nuestras joyas si, como neutro en la parte superior, llevamos una blusa o un top negro.
Oscar de la Renta mezcla sedas de colores con encaje sobrepuesto, en vestidos de noche, y adorna trajes de cóctel con bordados en blanco en mangas y falda.
Si una mujer responde a la denominación de ser un ejemplo de elegancia y estilo es la princesa Carolina de Mónaco. Cada detalle de su vestuario es escrutado al máximo. Su hija Carlota es digna sucesora de su madre y, a pesar de su juventud, luce como nadie vestidos de gala o ropa de sport. La pequeña Alejandra, empieza ya a ser también protagonista por su manera de vestir. Las tres visten a menudo de negro, pero al mismo tiempo combinaban color y diseño elegante con detalles en rojo -u otros tonos- que alegran sus atuendos.
Angelina Jolie y Penélope Cruz son dos de las mujeres que más utilizan el negro cuando posan ante los fotógrafos. Su tono de piel y sus rasgos se ven favorecidos.
Keira Knightley y Leighton Meester son incondicionales de los modelos de Chanel, quien incluye en sus diseño broches “vintage”, en plata y diamantes, para la cintura y las mangas.
Cameron Díaz sabe que sus interminables piernas le permiten lucir minivestidos que cortan la respiración a la legión de admiradores que en todas partes del mundo siguen su imagen.
Madonna a menudo luce vestidos negros en contraste con collares de brillantes.
Juegos de colores en el que el color negro, siempre es el protagonista.