EL FIN DE SEMANA PASADO

Juninenses participaron de la exposición de maquetas de aviones a escala en Morón

Se trata de Ricardo Becerra y Néstor Aloisi, quienes se hicieron presentes en el evento desarrollado el fin de semana pasado en el Museo Nacional de Aeronáutica. “Lo que hacemos nosotros es un hobby”, dijeron a Democracia.

En el Museo Nacional de Aeronáutica de Morón, dos juninenses participaron con sus creaciones de la exposición de maquetas a escala, donde además hubo una muestra de autos clásicos y una charla de veteranos de la Guerra de Malvinas.

Se trata de Ricardo Becerra y Néstor Aloisi, quienes se hicieron presentes en el evento desarrollado el fin de semana pasado. “Lo que hacemos nosotros es un hobby. Es para desenchufar un poco”, comenzó diciendo Becerra a Democracia.

“Néstor lo que hace son modelos de aviones antiguos, los saca de planos de libros y lo confecciona todo en madera y los pinta”, agregó.

“Lo mío es distinto”, aclaró. Y continuó: “Lo que yo hago es en plástico y modelismo. Son maquetas que vienen en un kit, donde vienen muchas piezas, todo desarmado. Se arma, se pinta, se pega calcomanía. Hay de todo. Yo hago aviones, pero vienen barcos, autos, motos, camiones y tanques de guerra. Son modelos a escala del real, distintas escalas, y el tema es hacer algo lo más parecido a lo real en chico”.

Sobre el Museo, dijo que es un espacio “importantísimo” y que cree que es “uno de los mejores museos aeronáuticos que tenemos en la Argentina. Hay unas piezas históricas bárbaras, aviones que estuvieron en Malvinas, y los primeros aviones que anduvieron acá”.

Las maquetas fueron expuestas “entre los aviones reales presidenciales; los que fueron a la Antártida -que ya no vuelan-, como un DC 3, y aviones antiguos. Es un museo excelente y es muy lindo recorrerlo”, afirmó Becerra.

El encuentro fue organizado por la Asociación Plastimodelista del Oeste (APO). “Lo que hace es juntarse para lo que hacemos nosotros, y ahí se juntan en un grupo y tienen un lugar donde hacen maquetas, intercambian ideas, prestan herramientas, y enseñan”, informó. 

Cabe destacar que cada dos años se hace una competencia, una exposición, donde se lleva un modelo en el que participan distintos grupos de todo el país. “Van los independientes como somos nosotros a presentar, a competir, y pasar el día”, explicó.

“Las maquetas se exponen entre medio de otros aviones reales. Se pasan dos días muy lindos porque uno se encuentra con amigos y con gente que por ahí chatea o se manda mensajes por WhatsApp. Es una buena excusa para encontrarse a hablar”, concluyó Becerra.

“Comencé en plena pandemia”

Aloisi, que se dedica al arte desde hace tiempo, destacó: “Comencé en los años 90, principalmente con la pintura. También hice mosaico y realicé muchas esculturas de hierro, principalmente con materiales o piezas recicladas”.

El artista mencionó que el armado y diseño de las maquetas de aviones comenzó a mediados del año 2020 y que la idea proviene de las revistas del autor Guillermo Guerrero.

“Comencé en plena pandemia. Yo tenía dos revistas Lúpin y un día le dije a mi señora ‘voy a hacer el avión de Lúpin’ y arranqué. Con maderas de cajón armé mi primer avión”. 

El diseño del primer avión fue un Nieuport 28 de la Primera Guerra Mundial. Y Aloisi reconoció que fue ahí donde comenzó su amor por las maquetas de aviones. “El ángulo de las varillas que sostienen el ala lo hice de una, sin medir ni nada, y a partir de ese momento me entusiasmé. Un íntimo amigo, fanático de las maquetas, me prestó las enciclopedias de aviones, con tres tomos dedicados exclusivamente a los diseños”, contó.

El entrevistado hizo mención a que el armado de maquetas es un trabajo milimétrico y resaltó que “las dificultades de realizar los aviones consisten en que un error milimétrico te puede costar el modelo, debido a que está hecho con piezas muy específicas”.

Asimismo, el artista resaltó cómo con materiales caseros o reciclados construyó los diseños. Y comentó: “Lo más loco de los diseños, por ejemplo, el Nieuport 28, es que en casa había una cama de cuatro patas, tomé un taco y lo enfrenté junto a un portalámparas de madera que había en mi casa, y dije 'esto es un avión'”. 

“Para llevar a cabo las maquetas de los aviones utilizo mayormente materiales reciclados, por ejemplo, toda madera que estaba en casa o cosas que me iban dando mecánicos o encontrando”, relató.

Finalmente, comentó que su pasión por los aviones se la debe en gran medida al autor de las revistas de historietas. Y expresó: “Me encantan los aviones biplanos, son más lindos. Se lo debo a Guerrero y a sus diseños en las historietas de Lúpin”.