Pantallas, celulares, Internet y cambios de hábito son los principales responsables de los trastornos a la hora de dormir, aseguraron hoy especialistas del Hospital de Clínicas de Buenos Aires ante la celebración del Día Mundial del Sueño.
"En esta última década dormimos dos horas menos de lo que dormíamos hace 20 años", sostuvo Facundo Nogueira, jefe del Laboratorio del Sueño del Hospital de Clínicas, al expresar que se trata de un fenómeno cultural de la modernidad.
El profesional dijo "nos acostamos cada vez más tarde y tenemos que levantarnos temprano para viajar hasta el trabajo. La expansión de las ciudades nos quita tiempo de descanso y lo convierte en tiempo de viaje".
"Además, con la llegada del celular, las computadoras, la televisión e Internet -enfatizó- estimulamos más nuestro cerebro, exponiéndolo a la luz artificial hasta la madrugada, lo que impide que el organismo entre en la fase de reposo".
Según Nogueira "el cerebro necesita descansar por lo menos 8 horas diarias. Si pasadas las once de la noche estamos aún recibiendo altas dosis de luz artificial y recibimos información a través del celular y otros dispositivos, a nuestro cuerpo le cuesta mucho más entrar en la fase de reposo".
La calidad del sueño, señaló, se mide por el cansancio que una persona padece durante el día, en tanto otros indicadores tienen que ver con lo que sucede durante la noche, principalmente con la respiración.
"Se estima que a nivel mundial entre el 50 y el 70% de los hombres roncan. En cuanto a mujeres, la cifra se reduce a la mitad", dijo el especialista en un comunicado emitido por el hospital.
Nogueira precisó que "el 20% de la población tiene insomnio, que es aquella dificultad para dormir que se extiende por más de tres meses", en tanto "la apnea es el trastorno respiratorio más grave y uno de los principales en las alteraciones del sueño".
Respecto de los ronquidos dijo que en general el que lo sufre consulta al médico recién cuando alguien se lo hace notar, "pero hay otros síntomas a tener en cuenta: si la persona se despierta mucho durante la noche, un dolor de garganta persistente, dolor en las piernas o dificultad para dormir".
El Laboratorio del Sueño aconsejó "darle la importancia que tiene y descansar por lo menos 8 horas diarias; reducir la exposición a pantallas después de las 11 de la noche; cuidar la alimentación: la cena no debería ser la comida más importante del día".
Asimismo, recomendó "hacer actividad física regular, dos a tres veces por semana, preferentemente por la mañana y la tarde. No durante la noche, pues el efecto es el contrario".
También ayudan a conciliar bien el sueño nocturno una siesta corta si la persona está cansada y evitar desde el atardecer los productos estimulantes como el chocolate, el café y las bebidas cola.
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