Misterio por el caso de la bebé arrojada desde un edificio

La joven de 18 años acusada de haber arrojado a su bebé recién nacida por un ventiluz declaraba ayer ante la fiscal de la UFI de Género de San Isidro, en la causa en la que se la investiga por el delito de “homicidio calificado por el vínculo”, informaron fuentes policiales.
El hecho ocurrió el miércoles a la tarde en un edificio en la avenida Yerbal al 300 del barrio Santa Rita, a tres de cuadras del cruce de la autopista Panamericana y la avenida Márquez, en la localidad bonaerense de Boulogne.
Fuentes policiales bonaerenses informaron a Télam que la joven dio a luz en el baño de su departamento, ubicado en el primer piso, y luego arrojó al bebé por el ventiluz que da a un patio interno del edificio. 
La mujer quedó internada Hospital Materno Infantil, con custodia policial y a disposición de la fiscalía de Género de San Isidro a cargo de la fiscal Laura Zysefkind, quien instruyó actuaciones por “homicidio calificado por el vínculo” y confirmó a Télam que procederán a realizar las indagatorias. 
Una vecina, que encontró en el patio al bebé, con el cordón umbilical adherido, fue quien avisó a la Policía.
La víctima, una bebé sietemesina, y su madre, Sheila Caceres de 18 años, fueron llevadas al hospital local, donde la nena murió a las 20.40 del miércoles. En declaraciones a medios periodísticos, algunos vecinos informaron que conocían a la joven y que ella no tenía novio.
También que la madre no sabía nada de su embarazo, hasta que finalmente ocurrió lo del miércoles.
“Hay que investigar qué es lo que pasó, ella tiene un perfil tranquilo, cometió un error, pero hay que ver qué se le paso por la cabeza”.
“La mamá está muy presente y le preguntaba por su condición, pero ella se excusaba diciendo que estaba más gorda, por un problema de tiroides”, dijo ayer  a la prensa Mariano, un vecino que conocía a la familia de la joven.