El Gobierno desplazó ayer a tres custodios e incrementará las medidas de seguridad de la Casa Rosada, a raíz de las falencias exhibidas durante el episodio del automovilista que atravesó uno de los portones de acceso sobre la calle Balcarce y estuvo a poca distancia de ingresar al interior de la sede gubernamental.
Por el hecho, ocurrido hace ocho días, ayer fueron relevados tres agentes de la Policía Federal que estaban de guardia cuando ocurrió y el juez Sergio Torres, a cargo de la investigación, le requirió informalmente a Casa Militar que elabore un nuevo plan para la custodia de la Casa Rosada.
“Cuando asumimos, las medidas de seguridad (de la Casa de Gobierno) eran bastante obsoletas. Se trató de resolver ahora lo urgente, pensando en el corto plazo, mientras seguimos avanzando con otras reformas más complejas que llevan más tiempos administrativos”, señaló una fuente gubernamental.
Las medidas fueron tomadas por el secretario general de la Presidencia, Fernando De Andreis, quien tiene bajo su órbita la dirección de Casa Militar, a cargo del general José Luis Yofre y del cual dependen la custodia presidencial de la Policía Federal y los Granaderos que custodian la Casa Rosada y la Residencia de Olivos.
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