LA NOCHE DEL DOMINGO SE VISTE DE FICCIÓN EN CANAL 9 CON UNA HISTORIA ATRAPANTE
Babylon, el regreso del policial negro
Protagonizado por Federico Olivera, secundado por Norman Briski y Luis Luque, la trama, con visos oníricos, ofrece una interesante variante en la programación de aire.
Las noches del domingo en la televisión local, hasta ahora surcadas por los ecos futboleros o la política, hallaron un remanso de talento con el estreno del policial negro Babylon, que desembarcó en la pantalla de Canal 9 con una propuesta fascinante.
Guiones ajustados, actuaciones notables y una puesta de carácter cinematográfico dominada por el blanco y negro, construyen la base sobre la que se asienta una historia que atrapa desde un humor desopilante e inteligente a la vez.
Desde las 22, pegadito a otro estreno de ficción -el unitario Amores de historia-, Babylon se mete en la atmósfera de los casos policiales para sacarle el jugo a personajes de riquísima factura.
El peso de la trama parece recaer en el fiscal Frank Vitelli (Federico Olivera) quien procura reconstruir la vida de su padre muerto a partir de visitar los lazos que supo tejer como líder de un terceto policial que completaban Lauro das Pedras (Norman Briski) y Juan Clay (Luis Luque).
A Clay, creador de un sistema de inteligencia artificial basado en la certeza de que la mayoría de los crímenes están motivados por la codicia, la venganza y los celos, lo conoce bien porque forma parte de su peculiar y cientificista equipo de investigaciones.
Con el veterano, retirado y perseguido por la mala suerte Lauro, en cambio, se encuentra en el marco del cabaret que da nombre a la serie, lugar que frecuentaba su padre y único ámbito en colores de toda la historia.
El lugar, de ambiente mágico y jazzero más cercano a la tradición onírica de la nocturnidad que a la cruda realidad de esos recintos donde mandan la marginalidad y la prostitución, es dirigido por la intrigante y sensual "Tanita" (Martina Gusmán).
Mientras Frank trata de acomodarse a su nueva vida en pareja con Pucca (“en mi casa vivo con mi novia. Ella se mudó a mi casa. Ya no es mi casa”, reflexionó mientras cruzaba la ciudad en una modesta y antigua moto), se siente en el medio del equipo de singulares especialistas que acompañan a Clay y de los febriles personajes que secundan a Lauro.
Mientras los formados laderos del policía no logran descubrir el extraño asesinato de una joven madre que recibió un balazo en la frente sentada en el banco de una plaza, la no-lógica de Lauro y su muchachada determina la culpabilidad del cura, un avezado francotirador preocupado por los demonios que habitaban en el paseo.
Un buen policial
Al margen de la resolución del caso y de los ingeniosos contrastes claramente perfilados en la trama urdida entre Gastón Portal, Alberto Muñoz y Javier Castro Albano, Babylon irrumpió como una propuesta sumamente original para visitar lo policial.
La serie de 13 capítulos producida por GP Media, es una de las ganadores del concurso del Consejo Interuniversitario Nacional impulsado por el Ministerio de Planificación de la Nación, inició su tránsito con un rating que la consultora Ibope estimó en 2 puntos.
Santiago Pedrero, John Mc Inerny (El último Elvis), Gigí Ruá, Alexia Moyano, María Zamarbide y la incorporación de Martín Slipak con participaciones especiales en cada capítulo, completan el elenco de la tira.
Guiones ajustados, actuaciones notables y una puesta de carácter cinematográfico dominada por el blanco y negro, construyen la base sobre la que se asienta una historia que atrapa desde un humor desopilante e inteligente a la vez.
Desde las 22, pegadito a otro estreno de ficción -el unitario Amores de historia-, Babylon se mete en la atmósfera de los casos policiales para sacarle el jugo a personajes de riquísima factura.
El peso de la trama parece recaer en el fiscal Frank Vitelli (Federico Olivera) quien procura reconstruir la vida de su padre muerto a partir de visitar los lazos que supo tejer como líder de un terceto policial que completaban Lauro das Pedras (Norman Briski) y Juan Clay (Luis Luque).
A Clay, creador de un sistema de inteligencia artificial basado en la certeza de que la mayoría de los crímenes están motivados por la codicia, la venganza y los celos, lo conoce bien porque forma parte de su peculiar y cientificista equipo de investigaciones.
Con el veterano, retirado y perseguido por la mala suerte Lauro, en cambio, se encuentra en el marco del cabaret que da nombre a la serie, lugar que frecuentaba su padre y único ámbito en colores de toda la historia.
El lugar, de ambiente mágico y jazzero más cercano a la tradición onírica de la nocturnidad que a la cruda realidad de esos recintos donde mandan la marginalidad y la prostitución, es dirigido por la intrigante y sensual "Tanita" (Martina Gusmán).
Mientras Frank trata de acomodarse a su nueva vida en pareja con Pucca (“en mi casa vivo con mi novia. Ella se mudó a mi casa. Ya no es mi casa”, reflexionó mientras cruzaba la ciudad en una modesta y antigua moto), se siente en el medio del equipo de singulares especialistas que acompañan a Clay y de los febriles personajes que secundan a Lauro.
Mientras los formados laderos del policía no logran descubrir el extraño asesinato de una joven madre que recibió un balazo en la frente sentada en el banco de una plaza, la no-lógica de Lauro y su muchachada determina la culpabilidad del cura, un avezado francotirador preocupado por los demonios que habitaban en el paseo.
Un buen policial
Al margen de la resolución del caso y de los ingeniosos contrastes claramente perfilados en la trama urdida entre Gastón Portal, Alberto Muñoz y Javier Castro Albano, Babylon irrumpió como una propuesta sumamente original para visitar lo policial.
La serie de 13 capítulos producida por GP Media, es una de las ganadores del concurso del Consejo Interuniversitario Nacional impulsado por el Ministerio de Planificación de la Nación, inició su tránsito con un rating que la consultora Ibope estimó en 2 puntos.
Santiago Pedrero, John Mc Inerny (El último Elvis), Gigí Ruá, Alexia Moyano, María Zamarbide y la incorporación de Martín Slipak con participaciones especiales en cada capítulo, completan el elenco de la tira.