LA BANDA SE ACTUALIZA EN ESTE DISCO QUE GRABO EN LAS SIERRAS CORDOBESAS

Las Pelotas rompe con su tradición en "Cerca de las nubes", su nuevo trabajo

El quiebre es el eje de este álbum que propone un nuevo recorrido por la sonoridad de la banda. Pese a haberse grabado en la sierra, el disco es potentemente urbano.

El grupo argentino Las Pelotas lanzó su décimo disco de estudio Cerca de las nubes, que rompe cualquier vínculo con sus álbumes anteriores Basta y Despierta, ya que la banda se involucró en un drástico cambio de sonoridades rescatando en el espíritu alternativo de los 90, del post punk, pero con los pies bien puestos en el siglo XXI.
Siempre inquietos, los integrantes del grupo decidieron cambiar radicalmente su sonido, desde el trabajo que Gustavo Jove realizó en la batería, hasta la notable labor de Tomás Sussman con las guitarras, sumada al despliegue como instrumentista pero también como productor de Sebastián Schachtel.
El tecladista compartió su rol de productor con el líder del grupo Germán Daffunchio, y ambos trabajaron con resultados que hablan de una clara influencia del trabajo que Brian Eno realizó al frente de las perillas en discos de U2, Coldplay y propios.
"Queríamos un disco rupturista, no queríamos que se pareciera en nada a los discos anteriores, siempre nos proponemos eso, pero en este la premisa era muy clara", explicó a Télam, la bajista Gabriela Martínez.

En las sierras

Con ese fin, Las Pelotas acondicionó y modernizó su estudio Los Angeles, ubicado en la localidad serrana de Nono, en Córdoba y allí se trasladaron.
El periplo se inició en diciembre con largas sesiones de ensayo y composición durante este verano, con algunos descansos, hasta llegar a casi 30 canciones.
Además tanto Martínez como Daffunchio, el baterista Gustavo Jove, el tecladista Schachtel, el percusionista y trompetista Alejandro Gómez se instalaron a vivir en Nono como en los viejos tiempos de la génesis de Sumo o los primeros años de Las Pelotas.
"Fue muy bueno estar todos juntos y armar este disco como un proceso colectivo, todos aportando en la composición, todos sumándole partes e ideas a la canción", explicó Sussman, quien sí vive en Córdoba.
Cuando lo esperable hubiera sido que en ese ámbito serrano, Las Pelotas emergiera con un disco campestre, folk y hasta acústico, la banda escapó del estereotipo y tiene entre sus manos un álbum bien eléctrico y urbano que bien podría servirle de banda de sonido a una metrópolis posmoderna, casi al estilo Blade Runner.
El inicio es con una balada "Cuantas cosas" en la que la voz de Daffunchio navega por sobre un cuarteto de cuerdas dirigido por Alejandro Terán.
Otro punto de ruptura es en las letras, con un Daffunchio menos rabioso, más intimista y siempre melancólico, una característica de Las Pelotas a lo largo de toda su historia.  "Sí, le pedimos a Germán que en las letras no se notara su enojo con el mundo, que mirara hacia adentro, porque el mundo sigue mal, más allá de su enojo", explicó Martínez.
La bajista sigue teniendo un rol importante dentro del grupo no solo por lo que aporta con las cuatro cuerdas, sino porque está siempre presente en coros o arreglos vocales.