LOS FESTEJOS CARNAVALESCOS TUVIERON LUGAR EN VARIOS PUNTOS DEL PAIS
La fiesta, la música, los brillos y la samba fueron protagonistas
El fin de semana de Carnaval tuvo sus festejos y comparsas en distintos puntos del país y del mundo.
El fin de semana de Carnaval tuvo sus festejos y comparsas en distintos puntos del país y del mundo.
Desde el ya conocido Carnaval de Gualeguaychú, pasando por los propios de Catamarca y Corrientes, las murgas y corsos en Buenos Aires y el ya mítico Carnaval de Río de Janeiro, todos bailaron al ritmo de la samba y se maravillaron con los brillos, carrozas y plumas.
El lunes por la noche, más de 20.000 personas fueron partícipes del "Carnaval de la Alegría", en el Predio Ferial Catamarca, que culminó con la espectacular presentación de la comparsa entrerriana Marí Marí.
La agrupación de Gualeguaychú reinó en un desfile en el que también participaron 20 murgas y unas 15 murguitas, con el marco imponente del entusiasmo del público.
Ni la gobernadora, Lucía Corpacci, quiso perderse la fiesta, a la que asistió desde el palco central del Sambódromo.
Los festejos incluyeron un homenaje a Manuel "El Loco" Flores, un reconocido locutor y periodista de las décadas del 50, 60 y 70 del siglo pasado, precursor de los festejos de Carnaval en todo el país. La secretaria provincial de Cultura, Patricia Saseta de Molas, entregó una placa recordatoria a Karina Flores Frías, hija del homenajeado.
La policía confirmó que a pesar de la fuerte lluvia que se desató alrededor de las 23, no hubo incidentes en la desconcentración.
Buenos Aires también festejó el carnaval. En los distintos barrios porteños se desplegaron murgas y comparsas, que bailaron al son de canciones impregnadas de realidad y temas importantes de la historia de la Argentina.
Para celebrar el logro de la oficialización del Carnaval, el Centro Cultural Ricardo Rojas brindará entre hoy y el 25 espectáculos gratuitos y presentará el libro Talleres de murga del Rojas, el árbol genealógico, gestado desde la fuerza creativa de la calle, afirmó el músico y recopilador del texto Coco Romero.
Coordinadas por Romero, también titiritero e investigador del carnaval porteño, las jornadas –en la avenida Corrientes 2038– festejarán 17 años de la revista El Corsito, con su ejemplar 42, cuyo lema histórico fue "Momo volvé, nosotros te queremos".
"Lo que es más doloroso de nuestro Carnaval, es que desde la década del 30 a 1976, casi cincuenta años, la sociedad está marcada por la represión, que anula el pensamiento y la palabra, mientras el cuerpo resiste, medio bestializado", sintetizó Romero.
Al historiador del Carnaval porteño le interesa "que se revea el corpus letrístico, porque no hay algo representativo de modo veraz, y si hay poetas pero no hay reivindicación, ese murguero se lleva como un recuerdo querido personal, pero no social".
Con la tarea de alentar "la fuerza creativa de la calle", apenas recuperada la etapa constitucional, el Rojas albergó a un conjunto de jóvenes que "salieron con una cabeza más amplia y han generado una cantidad de cuestiones de divulgación, de estética, de puestas, de otras miradas, que los pusieron a crecer".
"Cuando vuelve el Carnaval al calendario oficial, para mí hay un cierre de etapa, entonces en el libro entrevistamos a 23 jóvenes formados acá, que se transformaron en agitadores del Carnaval y hoy son líderes que proponen líneas estéticas diversas", dice Coco.
Desde el ya conocido Carnaval de Gualeguaychú, pasando por los propios de Catamarca y Corrientes, las murgas y corsos en Buenos Aires y el ya mítico Carnaval de Río de Janeiro, todos bailaron al ritmo de la samba y se maravillaron con los brillos, carrozas y plumas.
El lunes por la noche, más de 20.000 personas fueron partícipes del "Carnaval de la Alegría", en el Predio Ferial Catamarca, que culminó con la espectacular presentación de la comparsa entrerriana Marí Marí.
La agrupación de Gualeguaychú reinó en un desfile en el que también participaron 20 murgas y unas 15 murguitas, con el marco imponente del entusiasmo del público.
Ni la gobernadora, Lucía Corpacci, quiso perderse la fiesta, a la que asistió desde el palco central del Sambódromo.
Los festejos incluyeron un homenaje a Manuel "El Loco" Flores, un reconocido locutor y periodista de las décadas del 50, 60 y 70 del siglo pasado, precursor de los festejos de Carnaval en todo el país. La secretaria provincial de Cultura, Patricia Saseta de Molas, entregó una placa recordatoria a Karina Flores Frías, hija del homenajeado.
La policía confirmó que a pesar de la fuerte lluvia que se desató alrededor de las 23, no hubo incidentes en la desconcentración.
Buenos Aires también festejó el carnaval. En los distintos barrios porteños se desplegaron murgas y comparsas, que bailaron al son de canciones impregnadas de realidad y temas importantes de la historia de la Argentina.
Para celebrar el logro de la oficialización del Carnaval, el Centro Cultural Ricardo Rojas brindará entre hoy y el 25 espectáculos gratuitos y presentará el libro Talleres de murga del Rojas, el árbol genealógico, gestado desde la fuerza creativa de la calle, afirmó el músico y recopilador del texto Coco Romero.
Coordinadas por Romero, también titiritero e investigador del carnaval porteño, las jornadas –en la avenida Corrientes 2038– festejarán 17 años de la revista El Corsito, con su ejemplar 42, cuyo lema histórico fue "Momo volvé, nosotros te queremos".
"Lo que es más doloroso de nuestro Carnaval, es que desde la década del 30 a 1976, casi cincuenta años, la sociedad está marcada por la represión, que anula el pensamiento y la palabra, mientras el cuerpo resiste, medio bestializado", sintetizó Romero.
Al historiador del Carnaval porteño le interesa "que se revea el corpus letrístico, porque no hay algo representativo de modo veraz, y si hay poetas pero no hay reivindicación, ese murguero se lleva como un recuerdo querido personal, pero no social".
Con la tarea de alentar "la fuerza creativa de la calle", apenas recuperada la etapa constitucional, el Rojas albergó a un conjunto de jóvenes que "salieron con una cabeza más amplia y han generado una cantidad de cuestiones de divulgación, de estética, de puestas, de otras miradas, que los pusieron a crecer".
"Cuando vuelve el Carnaval al calendario oficial, para mí hay un cierre de etapa, entonces en el libro entrevistamos a 23 jóvenes formados acá, que se transformaron en agitadores del Carnaval y hoy son líderes que proponen líneas estéticas diversas", dice Coco.