ENTREVISTAS CON ARTISTAS

Cuarteto y tropical: Los ritmos que escribieron su historia en Junín

Desde la década del ochenta hasta el presente, clubes, salones y boliches fueron sede de shows inolvidables, y la ciudad se convirtió en exponente de los géneros a nivel nacional. Democracia dialogó con los icónicos músicos que hicieron y continúan haciendo historia.

Talento, ritmo, multitudes y artistas de renombre. Así se resume el mundo del cuarteto y la música tropical local. Con exponentes que se destacan desde hace 50 años, bandas que expandieron y popularizaron el género y músicos que emergen en la escena local, generaciones se cruzan y estrechan lazos en un ambiente signado por la camaradería. 

Junín es un exponente de la música bailable a nivel regional y nacional. Democracia dialogó con sus figuras más destacadas, apasionados del género que recorren los escenarios hace muchos años, grabaron numerosos discos, y trabajan en nuevos proyectos. 

Precursores

Hay quienes escriben la historia, inauguran una era y marcan un antes y un después. En el cuarteto y la música tropical local los nombres están muy definidos.

Osvaldo “Corazón” Gaitán, de 77 años, es un artista cordobés nacido en Laboulaye, pero devenido juninense. En diálogo con este diario, destacó que “hace 63 años” que está arriba de los escenarios y que arribó a la ciudad en la década del ochenta, cuando trabajaba “de martes a domingos sin parar”.

“Cuando vine a Junín el cuarteto era desconocido”, explicó Osvaldo, que desembarcó en la escena local para acompañar a Eleuterio Pigliapoco, “quien se destacaba en ese entonces, y sonaba mucho”. Es así como “Corazón” Gaitán escribió las primeras páginas de la música popular en Junín, donde tocó “en los setenta, ochenta, noventa y principios de los 2000”, para luego emprender giras más extensas y hacia nuevos horizontes. “Soy un agradecido infinito, es una ciudad espectacular”, destacó.

Por su parte, Rubén “Sensación” Citterio fue quien también supo explotar el ritmo tropical y hacer bailar a toda una región. Consultado por Democracia, el artista explicó que hace 42 años fundó su propia banda y, desde entonces, no se ha bajado de los escenarios. “Siempre se dice que triunfar en tu misma tierra es difícil y conmigo sucedió todo lo contrario: Junín siempre me apoyó”, afirmó Citterio. Asimismo, también reconoció que “el mundo del cuarteto y tropical de Junín es muy bueno y tiene mucha convocatoria desde la década del ochenta hasta la actualidad”.

Por su parte, María Estela Cardozo, conocida ampliamente por su nombre artístico, “Mary La Dulce”, cuenta con 50 años de trayectoria. Compartió escenarios con artistas como María Marta Serra Lima, Sandro y Sergio Denis, y se acercó a la cumbia cuando era adolescente. “Yo quería vivir de la música, eso lo tenía muy claro”, recordó la cantante.

Para los históricos artistas, la década del ochenta y noventa fueron inimitables. “Trabajábamos de martes a domingo, había bailes por todos lados y recorrimos todo el país”, afirmó Mary, que destacó que hacía “8 shows como mínimo por fin de semana”, y, para entonces, ya frecuentaba Capital Federal y Santa Fe, con convocatorias de más de 4000 personas

“A mediados de los ochenta, se inauguraron las bailantas en Buenos Aires. Yo las hice a todas”, afirmó Gaitán, quien también supo trabajar con Olmedo, Calabró, Moria Casán, y Portal, y actualmente comparte escenario con su nieto, Santiago, la tercera generación de artistas en su familia. “La música me dio todo lo que tengo, mucha felicidad, amigos y una familia hermosa que siguió mi camino”, destacó.

Herederos

Pero la historia del cuarteto y tropical local no está escrita sólo por sus precursores, sino también por los artistas que los sucedieron, y expandieron el género y su popularidad entre diferentes franjas etarias y zonas del país.

Julio “Grillo” Núñez, fundador de “Los Reyes del Cuarteto”, también dialogó con Democracia sobre sus 35 años de carrera. A mediados de los ochenta, daba sus primeros pasos con su banda “Cuarteto Continental”; entre 1988 y 1995, formó parte de la orquesta de Mary “La Dulce” y, tras la separación del grupo, conformó “Los Chicos Piratas”, conjunto aún en actividad. “En 2002 fundé ´Los Reyes del Cuarteto´ y hasta el 2008 trabajé como arreglador de Los Piratas”, explicó.

“Tuve la suerte y capacidad de tener un puesto privilegiado en las bandas”, afirmó el músico, que ofició como director en los numerosos conjuntos en los que participó. Entre crisis económicas y épocas de gloria, Julio pudo subsistir y hacer historia con su pasión. “Tuve la suerte de poder vivir de la música, el cuarteto siempre me gustó mucho”, agregó, y destacó que “Reyes se está convirtiendo en un clásico”.

Por su parte, “Los Chicos Piratas” es, indudablemente, otra de las bandas que heredó el mundo inaugurado por los íconos de la escena local y fue también responsable de su trascendencia. Según explicó Fernando Piedrabuena, su fundador, a Democracia, en principio su música “se escuchaba en Buenos Aires y en Junín no”, puesto que sólo se habían presentado en contadas ocasiones.

La fama llegó rápido, y el despegue fue inesperado, pero supieron tomar el mando y brillar. Con más de 25 años de trayectoria, la banda está actualmente conformada por 16 músicos y sigue pensando a futuro con el cuarteto juninense, un género que les brindó muchas posibilidades.

“Nosotros venimos de una herencia”, afirmó Núñez, un experimentado en el campo. “Eleuterio Pigliapoco fue quien trajo el cuarteto de Villa Cañás a Junín en los sesenta”, explicó, y destacó que “a principios de los ochenta, Gaitán explotó el género y lo extendió a la juventud, y Sensación Citterio también continuó con dicha deriva”, que sin dudas dio muchos frutos. “Los Reyes del Cuarteto y Los Chicos Piratas somos la descendencia de ellos”, agregó.

Asimismo, el artista explicó a este diario que “después de Córdoba y San Juan, Junín es la segunda ciudad que ha anidado bandas de cuarteto que trascendieron”, y afirmó que es un género que “en la provincia de Buenos Aires siempre tuvo muy buena aceptación”.

Emergentes

El campo se ensancha de forma continua, y nuevos artistas irrumpen en la escena local para sumar éxitos a la extensa deriva del cuarteto y la música tropical. Al respecto, Citterio afirmó que “hay artistas de todos lados y siguen surgiendo nuevos”, muchos de los cuales interpretan sus canciones. “Me llena mucho de satisfacción, es muy importante para mí”, destacó.

En la extensa lista de quienes apuestan a la música popular y alegre se destaca “La Máquina Kuartetera”, un conjunto en actividad desde 2011. “Somos una banda de la ciudad que busca aportar a la cultura juninense”, explicó a Democracia su fundador, Claudio “Caio” Ibáñez, quien supo ser parte de varias agrupaciones, entre ellas “Los Reyes del Cuarteto”, banda que integró por 8 años, y con la que grabó varios discos y recorrió el país.
Por su parte, Claudio afirmó que “lo más difícil es perseverar y darse a conocer” y, respecto a sus predecesores y maestros, destacó que Mary “La Dulce”, con quien compartió escenario en contadas ocasiones, “es una gran exponente de la música tropical local”.

Los escenarios

“Junín siempre tuvo una movida muy importante del cuarteto y tropical”, destacó Julio, de “Los Reyes del Cuarteto”. Es que, fundamentalmente durante la época de oro, los clubes de barrio, sociedades de fomento y boliches bailables fueron sede de shows memorables.

“Los clubes Defensa, Suixtil, Moreno y Rivadavia eran los lugares más populares”, explicó Julio, que también enumeró los “bailes en la periferia de Junín, sobre todo en las sociedades de fomento de Capilla de Loreto, La Celeste y Mayor López”, así como las cenas-show. “No había internet ni cable. Los bailes y boliches eran el lugar para socializar los fines de semana, por eso había mucha más convocatoria que ahora”, agregó.
Sin embargo, curiosamente, Gaitán no fue recibido en sus inicios en el epicentro local. “Mi música no era la que sonaba en el Club Rivadavia, me costó ingresar”, afirmó el artista, que señaló que, cuando comenzó a dar shows, allí “fue un boom” y le permitió difundir su música por la región. 

Actualmente, Junín no ha dejado de ser el centro regional de la música popular, pero es incontrastable que la convocatoria no es análoga a la de décadas pasadas. “Antes, trabajar con 1200 personas nos parecía poco. Hoy, que haya 300 en un baile es un éxito”, afirmó Citterio, que recordó la ocasión en que, en conmemoración de la Fiesta de la Familia, se presentó en el estadio “Eva Perón” ante 25.000 asistentes. “Llegamos a tocar para 35.000 personas en festivales”, agregó el líder de “Los Reyes del Cuarteto”.

No obstante, según señalaron los artistas, la pandemia ha otorgado un notable impulso al género, y, tal como destacó Gaitán, “la gente tiene mucha necesidad de divertirse, y los bailes son muy concurridos”. Por su parte, las fiestas privadas han emergido como nuevo escenario de los artistas de cuarteto y tropical. En el caso de “Los Chicos Piratas”, Piedrabuena recordó que acostumbraban a “llenar los clubes Los Indios, Rivadavia y San Martín”, y que, al día de hoy, también se presentan en eventos privados.

Por su parte, Mary detalló que visita, de forma esporádica, “Sultana, Moreno, Rivadavia y bailes populares”, donde el espíritu del género se mantiene intacto. “El público de Junín es maravilloso, me recibe muy cálidamente hace muchos años”, destacó.

“Nuestro público es muy amplio, podemos tocar en un boliche o en un baile popular”, afirmó Ibáñez, de La Máquina Kuartetera. Es que, en líneas generales, tanto el cuarteto como la música tropical convocan a un público mayoritario y atraviesan las distintas franjas etarias. Incluso los más jóvenes bailan los hits de los 80, 90 y 2000, y aguardan por nuevos lanzamientos.

En actividad

Las posibilidades de crear y emprender nuevos proyectos están siempre latentes. Los músicos que suenan en la escena local, regional y nacional desde hace 20, 30 o 40 años continúan en actividad, estrechan los lazos con nuevos soportes y plataformas, y planifican su agenda semanal para encontrarse con el público.

“Tengo 22 discos grabados, y estoy preparando uno nuevo”, afirmó “Sensación” Citterio que, explicó, no se va a retirar: “Tengo cuerda para rato”. Mary, por el contrario, explicó que no planea nuevos lanzamientos, pero dedica su tiempo a las presentaciones ante sus seguidores. “La gente me recuerda y siempre me tiene presente”, afirmó.

Es ineludible que, actualmente, las posibilidades que otorga la difusión en internet han reconfigurado también el escenario del cuarteto y la música tropical. “La industria musical cambió muchísimo”, afirmó Ibáñez, que también señaló que “el artista puede distribuir su propia música sin depender de un contrato o una productora”, e incluso producirla en un estudio casero. “Editamos más de 6 discos físicos y singles para las plataformas digitales”, detalló, respecto a “La Máquina Kuartetera”.

En dicha transformación, los formatos físicos han caído en desuso. “El CD no se fabrica más, las plataformas son fundamentales”, destacó Julio, que grabó 12 discos con “Los Reyes del Cuarteto” y recordó que “antes de la era de You Tube e Internet, la banda dependía del sello discográfico” para sonar y ser reconocida. “Hoy con una computadora en casa podés ser tu propio productor”, agregó.

Asimismo, los músicos tuvieron que adaptarse a dicho cambio. “Ganaba muy bien vendiendo mis discos en los bailes”, afirmó Mary, que tiene en su historial 33 piezas publicadas, muchas de ellas con sellos de renombre. “Yo grabo los CD ́ s en forma particular y los distribuyo en los bailes. Soy un artista libre”, señaló Gaitán.

Además, es también el momento en que muchos conjuntos se reconfiguran y se preparan para nuevos objetivos. Respecto a “Los Chicos Piratas”, Piedrabuena destacó que “es una banda que tiene un proyecto”, y se percibe en el ingreso nuevos músicos y el lanzamiento de nuevas canciones. “El grupo está muy bien actualmente”, destacó su fundador, que reconoció que “Piratas siempre se caracterizó por los temas propios”, y, por ello, “esto es el principio de algo mucho más grande”.