Triángulos amorosos, infidelidades, racismo y disparos mortales
En 2021 los famosos hicieron de las suyas: desde celebridades que no pudieron resistir la tentación de algún cuerpo, a insultos racistas de la realeza. Pasó de todo
La farándula siempre da de comer: incluso si durante medio año no hubo actividad cultural, incluso si la tele ya no tiene audiencia como antes, ellos se las ingeniaron para armar revuelos de todo tipo, de los que se disfrutan como audiencia morbosa y de los graves de verdad. A continuación, un repaso del año escandaloso.
Las infidelidades de Horacio Cabak
Tuitero picante y polemista, a Horacio Cabak se le volvió en contra su fama 2.0 cuando su mujer, Verónica Soldato, reveló, filtrando explosivos audios y mensajes, que el ex modelo y conductor le había sido infiel. “Encontró más de una infidelidad en un celular. Él le dijo: ‘mirá tal cosa’ y ella empezó a buscar y encontró conversaciones con mujeres”, detalló Ángel De Brito, en el que fue el comienzo de uno de los escándalos del año, quizás solo opacado por Wanda. “Estoy destrozada. Hay audios pidiendo una habitación en un hotel para ir con una fotógrafa. Estoy abrumada, no me lo esperaba. No sé cómo voy a seguir. Son 27 años de pareja”, contó Verónica. Mientras tanto, Cabak presentó un recurso de amparo para que no se hablara del tema en los medios, y se negó a comentar el asunto en “Polémica en el bar”, envío del que participaba. Finalmente, rompió el silencio en “PH: Podemos Hablar”... algo que, claro, no cayó bien en América, que lo desvinculó de “Polémica” ante semejante traición. Aparentemente infiel serial, Cabak, de todos modos, solo dijo que “con mi mujer resolví lo que tenía que resolver. Hablé con ella y con las personas a las que tenía que explicarles lo que había pasado. A las semanas estábamos nuevamente juntos”.
La realeza racista
Desde que dejaron la casa real británica, Meghan Markle y Enrique han intentado tomar control de la narrativa que los rodea: de eso se trató la entrevista con Oprah, en la que la pareja decidió contar su verdad para cortar con lo que, según ellos, era una campaña de difamación construida desde algún sector de la realeza. Pero lo que contaron no fueron justificaciones o chismes, sino cuestiones verdaderamente estremecedoras: “En los meses en los que yo estaba embarazada, hubo preocupaciones y conversaciones sobre lo oscura que podría ser su piel cuando naciera”, tiró Meghan, que es mestiza y con raíces afroamericanas. La actriz contó que cuando esperaba en 2019 el nacimiento de su primer hijo, Archie, se enteró de que la Casa Real “no quería que fuera un príncipe” ni que “recibiera seguridad”. Ha añadido que se sintió abrumada por la idea de que su hijo “no fuera a estar seguro, y que al primer miembro de color de esta familia no se le diera un título de la misma forma que a otros nietos se les daría”. Meghan también reveló que su salud mental empeoró notablemente durante su primer embarazo, y que llegó un punto en el que tuvo que hablar en serio con Enrique porque tenía pensamientos suicidas “muy claros, reales y constantes, que daban miedo”: “Simplemente, ya no quería estar viva”. Ha afirmado que acudió a “una de las personas de mayor rango en la institución” de la Casa Real y le “suplicó que le ayudara” a mejorar su salud mental, pero le respondieron “que no, que no podían hacer nada” por ella. “Nunca hicieron nada, así que tuvimos que encontrar una solución”, agregó Meghan, en aparente referencia a la decisión de ambos de apartarse de la monarquía y empezar una nueva vida fuera del Reino Unido.
Chano, siempre Chano
Aunque siempre promete que es la última vez, Chano Charpentier volvió a ser protagonista de un hecho dramático: esta vez, terminó recibiendo un balazo en el abdomen. En otra confusa noche para el ex líder de Tan Biónica, su madre lo encontró en medio de una crisis psicótica producto del consumo de estupefacientes, pidió ayuda y cuando llegó la ambulancia Chano se puso agresivo: intervino la policía y Chano tampoco se dejó domar por los oficiales, abordando a uno con un cuchillo. El oficial disparó, el tiro le atravesó el abdomen al artista y debió ser trasladado al sanatorio Otamendi, donde fue intervenido de urgencia. Pero Chano es bastante parecido a alguien inmortal, y aunque le extirparon parte del páncreas, el bazo y el riñón izquierdo, y le suturaron una perforación del colon, salió adelante tras 18 días de internación. Siguió entonces un proceso profundo de desintoxicación que le permitió recientemente mostrarse recuperado, limpio y de vuelta a los escenarios a principios de noviembre. “Lo primero que quiero es pedirles perdón, a todos, a mi familia… Les prometo que voy a cambiar, amigos”, expresó en el primero de los tres shows que brindó en el Luna Park.
“Dejame hablar, mono”
Aunque los programas de la tarde han perdido tracción y protagonismo en la agenda diaria, cada tanto regalan una perlita escandalosa como la que se vivió en “Está en tus manos” en septiembre: allí, Adriana Aguirre le dijo “mono” a Anamá Ferreira, y tras el epíteto racista la ex modelo brasileña abandonó el estudio. Lo que ocurrió fue extraño, un insulto súbito. Aguirre se refería a su accidente cuando Ferreira la interrumpió para apurarla… y Adriana perdió, demasiado rápido, la paciencia y se despachó con una frase bien racista: “Dejame hablar, mono”, le tiró de manera despectiva y enérgica. Anamá dejó el estudio en el medio de la tanda. Ferreira afirmó que “me hizo mucho daño en mi corazón”, pero decidió no presentar cargos y la cosa quedó ahí.
Laje a cara de perro
En noviembre, María Belén Ludueña se despidió de los programas de Antonio Laje, “Buenos días América” y “Buenos días América Extra”, entre lágrimas. Las “vacaciones adelantadas”, como dijo Laje, de Ludueña, dejaron muchas dudas, y poco a poco comenzaron a aparecer numerosos testimonios de ex compañeras de Laje en las redes sociales acusándolo de maltrato y acoso. “Obviamente que tengo un humor a veces de perro y cuando las cosas salen mal me enojo, ¡claro que sí! Porque quiero que salga todo perfecto porque del otro lado están ustedes y ustedes merecen que todo esté bien... y si se corta un audio, si sale mal un graph, sí me enojo. Y ni siquiera lo oculto porque a veces me enojo y ustedes se dan cuenta de que estoy enojado. Pero yo me enojo desde lo laboral, no me enojo desde lo personal”, se defendió Laje. “Evidentemente las cosas cambian y a veces uno no cambia con el ritmo que tiene que cambiar y yo no tengo ningún problema en pedir disculpas si alguien se sintió maltratado. Lo único que quiero dejar en claro es que acá no hay maltrato, yo exijo, quiero que las cosas salgan bien, es lo único que me preocupa porque además es así como se forman los mejores profesionales”, agregó. El lío generó la salida de Liliana Parodi de la gerencia de programación de América, tras tres décadas en el cargo.
Britney liberada
2021 fue el año en que Britney Spears logró ser libre: tras años de indirectas en las redes sociales, la diva pop se cansó y avisó que no trabajaría más hasta que su padre abandone la tutela que pesaba sobre ella y no le permitía manejar su dinero, sus actividades, sus romances y ni siquiera le permitía tener hijos. Trece años vivió Britney de esa manera, hasta que una jueza puso punto final a la tutela legal sobre su persona y su patrimonio, valorado en unos 60 millones de dólares. “¡Dios mío, amo tanto a mis fans que es una locura! ¡Creo que voy a llorar el resto del día! El mejor día de mi vida, alabado sea el Señor. ¿Puedo recibir un amén?”, dijo Britney al recibir la noticia: los fans y los medios fueron la principal fuerza que empujó a torcer el punto de vista de los jueces, ya que es muy difícil salir de las tutelas. La presión de los fans para sacar a la luz detalles de la tutela legal comenzó en 2019, después de que Britney se negara a seguir ofreciendo espectáculos en Las Vegas e ingresara en una clínica de rehabilitación. En declaraciones ante ese tribunal en junio, Spears suplicó que le dejaran recuperar su vida y denunció que, aunque le gustaría tener un bebé, su tutor, en ese entonces su padre, no le dejaba ir al médico para quitarse el DIU (dispositivo intrauterino) que tenía insertado. El caso dio un giro en septiembre después de que el diario The New York Times publicara un reportaje con declaraciones de tres personas que habían trabajado para la artista durante su tutela: un empleado de seguridad, una asistente y su jefa de vestuario. Entre los testimonios más espinosos, el ex empleado de seguridad afirmó que el padre mandó colocar micrófonos en la casa de Britney, cuyas llamadas y mensajes eran interceptados, incluyendo las comunicaciones con su propio abogado y sus hijos.
El Wanda-gate
El escándalo del año lo protagonizaron la reina de las botineras, un delantero que quería hacer goles en otros arcos y una actriz acostumbrada a los líos románticos: estamos hablando, claro, del Wanda-gate, terrible triángulo amoroso que protagonizaron Wanda Nara, Mauro Icardi y La China Suárez. Todo comenzó un fin de semana en que Wanda y Zaira decidieron dejar a sus maridos en París para viajar juntitas de paseo a Italia. Mauro aprovechó, y no para pasar más tiempo con sus hijas; venía escribiéndose con La China mensajes condicionados, de alto voltaje, y aparentemente incluso habían protagonizado varias videollamadas muy hot, y el viaje de Wan le daba la ocasión para llevar a la presencialidad el affaire virtual. Lo que ocurrió allí, no se sabe del todo: La China, recientemente separada de Benjamín Vicuña, se encontraba en Madrid filmando, y se acercó a París en busca de un poco de placer, pero según ella misma le reconoció a la botirreina, no pasó nada. Quizás Mauro no pudo, quizás se hizo el distraído a la hora de concretar. No importa demasiado, porque el pecado virtual también es pecado, como se enteró el delantero cuando mientras le hacía una escena de celos a su mujer terminó intercambiando celulares con ella. Wanda encontró la tremenda evidencia (para colmo, en los mensajes Mauro decía querer separarse de la blonda) y se mandó a mudar, lanzando una frase terrible para la posteridad: “Otra familia que te cargaste por zorra”. Lo que siguió fue el show del culebrón: Mauro viajó a Italia a reconquistar a su mujer, se ganó un perdón parcial que duró porque le juró que todo había sido virtual y que se rompió cuando ella se enteró que hubo un encuentro, se volvieron a separar, volvieron a estar juntos, en el medio La China Suárez habló con Wanda y le pidió que intercediera en su favor… Un espectáculo. Al final, todo quedó igual: La China sigue soltera y Wanda y Mauro siguen juntos, aunque, dicen que dicen, Nara se pasea por Argentina con su custodio buscando “revancha”...
El tiro de la desgracia
El actor Alec Baldwin tomó un arma, apuntó y salió un tiro: se suponía que era solo una película, “Rust”, un western, pero el balazo hirió de muerte a la directora de fotografía Halyna Hutchins. El disparo se escuchó en todo Hollywood y sacudió los cimientos de la industria. Baldwin no solo tomó el arma que se disparó y que debía contener salvas, sino que era el productor de una película donde, aparentemente, ya había varias quejas por las condiciones laborales. Pero el actor no se siente responsable de la muerte de Hutchins: “Siento que hay alguien responsable por lo que ocurrió, y no puedo decir quién es, pero sé que no soy yo”, aseguró. El arma debía estar “fría”, sin armas, y “nunca apreté el gatillo”, afirmó el actor, aunque por su rol de productor sigue entre los apuntados, con varias demandas en contra. El actor, de todos modos, dijo que la tragedia, en el plano personal, fue lo peor que le ocurrió, y en el profesional, que no se imagina realizando otra película con armas. Esta historia continúa en los juzgados.