En noviembre de 2016, las cuentas oficiales de Facebook de Luisana Lopilato y Michael Bublé confirmaban la peor de las noticias: su hijo mayor, Noah, había sido diagnosticado con un cáncer de hígado. Durante largos meses, ambos se desconectaron de su carreras y se dedicaron exclusivamente a acompañar al pequeño en su tratamiento, que se extendió durante 18 meses.
La actriz argentina ha hablado en varias oportunidades sobre los doloroso que resultó ese proceso y de lo mucho que aprendieron como familia. El reconocido crooner canadiense, en tanto, fue mucho más reacio a tocar el tema en público hasta ahora: entrevistado por el Herald Sun de Australia, Bublé contó cómo vivió el angustiante camino hasta la recuperación de su pequeño. “Estuve en el infierno”, aseguró. “No doy precisiones, ni siquiera a mis amigos, porque duele demasiado. Es mi niño. Es un superhéroe, no necesita revivir lo que pasó una y otra vez. Pero estuve en el infierno. Y, ¿sabés qué? El infierno parece un lindo lugar para irte de vacaciones en comparación con lo que nos pasó a nosotros”.
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