En la mañana del viernes, vecinos de la localidad de Alem, se reunieron para acompañar el acto protocolar de la inauguración de dos logros muy deseados. Por un lado, un Centro de Rehabilitación equipado con toda la aparatología necesaria para realizar ejercicios, masajes y atención traumatológica, más los profesionales correspondientes. Y por el otro, el nuevo hogar de la queridísima Guardería “Semillitas”, que funcionaba temporalmente en una casa particular.
La locución estuvo a cargo de Lucila García Faiez, quien dio comienzo al acto saludando a las autoridades que se encontraban presentes: Intendente, Carlos Ferraris; Secretaria de Gobierno, Nancy Grimaldi; Director de Salud, Claudio Rocoma; Delegado Municipal, Héctor Sevillano; consejeros escolares; funcionarios; y otros delegados municipales. Seguidamente, se leyó una felicitación del Club Social y Deportivo “Martín D. Yrigoyen”.
Luego, una vecina de la localidad, Agustina González fue la primera en hablar, refiriéndose con cariño a la Guardería, considerándola un “semillero” de futuro mejor para todos, y también al Centro de Rehabilitación, como la posibilidad cierta de que los adultos de Alem puedan tener una vida mejor acudiendo allí con sus dolencias. Y cerró con una frase la fotógrafa Vanina Espinosa: “Hay que estar a la altura de las instituciones en las que nos movemos, enaltecerlas con nuestra colaboración y no entorpecerlas con nuestras mezquindades”.
En ese sentido, Ferraris agradeció a todos los presentes por estar acompañando en este acto y remarcó que “al momento de reunirnos con la gente de confianza de Alem, además de Hugo y concejales nos planteamos cuál era la urgencia prioritaria. Por eso, nos inclinamos por el Centro de Rehabilitación, por razones obvias de protección de la salud y solución para tratamientos y patologías crónicas de la gente de Alem”.
Por otra parte, sobre la Guardería dijo que este cumple seis años en Alem, “así que me parece que este es un regalo magnífico, esta sede que los va a albergar desde ahora”, y agregó “agradezco a la gente de Alem que trabajó tanto, albañiles, pintores, limpieza, se pusieron todo al hombro, con la mirada puesta en que estuviera en funcionamiento lo antes posible. Así es como se logran las cosas”.
“Nada es fácil en la vida, y yo les puedo asegurar que en gestión y en política tampoco. No hay que bajar los brazos frente a ningún proyecto, pero lleva horas y horas de andar, gestionar, escuchar, estar en todos los frentes. Somos un vecino más, sólo que con una gran responsabilidad en los hombros”, concluyó.
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