El avión, exhibido en la exposición aeronáutica AirVenture Oshkosh.
EL RISEN ES PRODUCIDO EN ITALIA

El rojense que cruzó el Atlántico en uno de sus aviones que fabrica para exhibirlo en Oshkosh

Se trata del ingeniero aeronáutico Alberto Porto, quien volvió a cruzar ese océano, esta vez para estar en esa exposición aeronáutica. “Despegué de Italia (donde vive), fui a Escocia, luego a Canadá y por último a Estados Unidos. Impactó mucho la travesía”, afirmó.

El rojense Alberto Porto volvió a cruzar el Océano Atlántico en uno de sus aviones que fabrica, esta vez para exhibirlo en la exposición aeronáutica AirVenture Oshkosh 2024 (Estados Unidos) que organiza la EAA (Asociación de Aeronaves Experimentales): es uno de los mayores encuentros aéreos del mundo, con 600.000 asistentes y 10.000 aeronaves presentes. 

Cabe destacar que Porto se formó como ingeniero aeronáutico en la Universidad Nacional de la Plata y luego se radicó en Italia donde diseñó el ultraligero más aerodinámico de todos, el Risen, producido por su compañía Porto Aviation Group.

Este año acudió en julio a Oshkosh con su Risen sin modificar —ni siquiera con depósitos de combustible extra— con motor Rotax 916iS, realizando el cruce del Atlántico Norte de un tirón, sin una sola escala. Fueron 1900 millas náuticas (3515 kilómetros), a una velocidad media de 165 kts (305.25 km/h), con poco más de 43 galones (163 litros) de combustible, de los 200 que lleva el modelo utilizado para el cruce.

Luego, en agosto, junto al copiloto Andrea Venturini, emprendió el cruce de vuelta a Italia, con viento de cola, que le permitió alcanzar velocidades de 400 kilómetros, recorriendo 3300 kilómetros en 8 horas y media.

El Risen es un avión de material compuesto certificado en la categoría de los 600 kilogramos, con un ala esbelta, de gran alargamiento, tren retráctil y cola en V, con un índice de planeo de 20:1.

“La exposición de Oshkosh es la más importante del mundo y nuestro mercado más importante está siendo Estados Unidos, donde tenemos más órdenes de compra que de Europa. Fue el primer año que lo presentamos, ya que la gente me lo compraba por la publicidad”, afirmó Porto en diálogo con Democracia desde Italia. Para llegar a Norteamérica decidió cruzar el Atlántico de una manera diferente. “Despegué de Italia, fui a Escocia, luego a Canadá y por último a Estados Unidos. Fui directo, ya que en realidad se va de Escocia a Islandia, luego a Groenlandia y a Canadá. Los aviones generalmente no tienen autonomía para hacer lo que hice yo. Son 3300 kilómetros sin escala a una velocidad de 300 kilómetros por hora”, explicó.

“Cuando llegamos a Estados Unidos, impactó mucho la travesía, y en menos de un mes vendí 20 aviones, mucho más de la producción que podemos hacer de manera anual”, informó el ingeniero. Después del viaje de ida, Porto regresó a Italia por el mismo recorrido con un promedio de 370 kilómetros de velocidad, pero hizo escala en Irlanda en vez de Escocia.

Cabe recordar que en octubre de 2017, había realizado un recorrido histórico entre Italia y Argentina, cuando decidió entregar personalmente uno de sus aviones a un cliente en Uruguay, viaje que aprovechó para aterrizar en su Rojas natal.

El vuelo de 11 mil kilómetros sobre el Atlántico comenzó en Pavullo (Italia), y continuó por Gran Canaria (España), San Felipe (Cabo Verde), Natal, Bello Horizonte y Sao Paulo (Brasil), hasta llegar a Punta del Este (Uruguay).

La travesía fue un evento de importancia para el destino, ya que contó con la cobertura de los medios de Europa y América. “La travesía a Argentina también fue bastante importante, pero esta vez (a Estados Unidos) hicimos más velocidad y no son las únicas que he hecho”, afirmó.

Según dijo, “la gente que compra mis aviones, los usa para uso privado, como medio de locomoción, y en Estados Unidos las distancias son largas, y en vez de tomar un avión comercial usan el Risen, que además tiene bajo costos”. “Yo trabajé muy duro todos estos años y realicé lo que yo quería hacer. En estos momentos estamos desarrollando nuevos aviones y estamos en la bolsa de Milano. Yo llegué a dónde quería y necesito conseguir más gente para seguir creciendo”, subrayó.

 

El Risen

El avión Risen, cuyo prototipo comenzó a construirse en 2010, y que voló en 2012, tuvo una alta aceptación por parte de la prensa especializada y del público en general. Entre sus características se encuentra un paracaídas montado en el fuselaje que se ejecuta por el piloto en caso de algún imprevisto. 

Tras más de 100 horas de vuelo, a principios de 2014 comenzó a construirse el primer avión Risen de serie, el cual fue presentado en marzo del 2015 en la Feria alemana Friedrichshafen, considerada la más importante de Europa.

El 16 de diciembre de 2015, la aeronave diseñada por Alberto Porto, estableció el récord mundial de velocidad para su categoría, superando los 323 kilómetros por hora, en vuelo recto nivelado y continuo, de acuerdo a la normativa de la Federación Aeronáutica Internacional (FEI), con un motor estándar modelo Rotax 912 ULS de 100 HP.

“Uno de mis objetivos fue proyectar mi propio modelo de avión y renuncié a otros proyectos y prioricé éste: logré crearlo. Se trata de un avión para turismo, para dos personas, que comenzó a volar en 2012, luego de cinco años de trabajos y de pruebas”, concluyó Porto.