Un grupo de entusiastas estudiantes de la Escuela Media Nº 3 se ha embarcado en una fascinante aventura para desentrañar los misterios del pasado en el sitio arqueológico de Loma Negra. Guiados por su curiosidad y pasión por la historia, estos jóvenes investigadores están excavando en las capas del tiempo para descubrir los secretos de un antiguo asentamiento militar del siglo XIX.
El sitio arqueológico de Loma Negra fue, en su momento, un bastión militar clave durante la guerra entre Buenos Aires y la Confederación Argentina (1852-1861). Las tropas del Ejército de Buenos Aires se acantonaban allí, tejiendo estrategias y preparando sus incursiones en el campo de batalla. Hoy en día, el lugar conserva vestigios de esa época turbulenta, ofreciendo a los estudiantes una ventana única al pasado.
Al estallar la guerra entre Buenos Aires y la Confederación, Rojas fue convertido en Cuartel General del Ejército, y desde el “Cantón de la Loma Negra” partían las fuerzas de Bartolomé Mitre a luchar contra Urquiza en la célebre batalla de Pavón. En dicho sitio se preparó el ejército provincial que en 1861 finalmente venció al confederado en la batalla mencionada imponiendo desde entonces la hegemonía de Buenos Aires sobre el resto del territorio.
Franco Abatangelo, encargado del museo y arqueólogo con experiencia en excavaciones en la zona, se ha convertido en el mentor de estos jóvenes exploradores del tiempo. Su conocimiento experto y su pasión por la arqueología han sido invaluables para guiar a los estudiantes en su investigación.
En una visita reciente al Centro Cultural Ernesto Sábato, los estudiantes tuvieron la oportunidad de interactuar con Franco Abatangelo y obtener información de primera mano sobre los hallazgos y la importancia histórica del lugar. Esta experiencia directa con los objetos y el testimonio de un experto han sido fundamental para que los estudiantes comprendan mejor la vida cotidiana en el asentamiento militar y el papel que este jugó en la historia de Rojas.
Los frutos de la investigación de los estudiantes se plasmarán en una muestra para la próxima Feria de Ciencias. A través de paneles informativos, maquetas y recreaciones, los jóvenes investigadores compartirán con la comunidad sus descubrimientos y lo que han aprendido sobre este importante sitio arqueológico.
La investigación sobre el sitio arqueológico la Loma Negra no solo ha permitido a los estudiantes profundizar en la historia de su región, sino que también ha sido una oportunidad para desarrollar habilidades de investigación, trabajo en equipo y pensamiento crítico. Además, esta experiencia ha despertado en ellos un interés por la arqueología y la importancia de preservar el patrimonio histórico.
Sobre Franco Abatangelo
El joven de 32 años estudió antropología en Rosario y en la actualidad forma parte de dos equipos de investigación arqueológica. Así, desde su lugar en el Municipio de Rojas busca revalorizar el valor histórico de la ciudad y crear un espacio para su difusión.
A principio de septiembre del 2023, se llevó a cabo en el Centro Cultural Ernesto Sábato de Rojas la primera muestra arqueológica, construyendo así el camino hacia la concreción de un Museo Municipal. De esta manera, el antropólogo rojense fue quien estuvo a cargo de cuestiones administrativas, gestión y organización respecto a la curadoría de los objetos expuestos, recabando la información que ubica cada uno de ellos en sus contextos históricos y estar en condiciones de armar exhibiciones.
“Fue una muestra donde confluyeron los trabajos de dos instituciones de las cuales formo parte. Una de ellas es el Centro de Estudios Antropológicos y Arqueológicos del Conflicto de la Universidad Nacional de Rosario, donde en el 2018 comenzamos a excavar en Rojas”, relató Franco y contó que esa tarea se llevó a cabo en un sitio llamado Loma Negra, donde existió un acampe del ejército de Buenos Aires durante la guerra contra la Confederación Argentina. “Este equipo se dedica exclusivamente a la guerra entre Buenos Aires y la Confederación. Estamos excavando en los sitios de las batallas y los campamentos como Cepeda, Pavón, Rojas y Cañada de Gómez”, manifestó el antropólogo.
Sus estudios
Franco contó que a los 18 años se fue a estudiar medicina a Rosario y en su primer año, cuando estudió todo lo que refiere a la evolución del hombre, se apasionó. “Me di cuenta que los que estudian eso son principalmente los antropólogos y también la cuestión de la medicina desde un enfoque social, no solamente biomédico. Ahí me empecé a interesar por las problemáticas sociales y el estudio de un abordaje más sociocultural”, sostuvo Abatangelo y agregó que “a los 23 años asumí el riesgo de estudiar la carrera de antropología y luego especializarme en arqueología, que es una de sus ramas”. En ese sentido, expresó que más allá de los miedos de no poder solventarse, hoy no se arrepiente de nada.
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