La idea de incorporar al Hogar de Ancianos San Francisco de Asís un taller con perros como protagonistas surgió en el marco de las reuniones frecuentes que lleva a cabo el equipo de profesionales de esta institución rojense. Si bien la intención inicial consistía en implementar la Zooterapia, luego se reparó en que no contaban con las herramientas indispensables para aplicar la terapia de manera correcta; así fue como optaron por armar un taller que busque promover el contacto y la interacción entre los abuelos del hogar y los canes del refugio municipal que sufrieron maltrato o atravesaron situación de calle. En diálogo con Democracia, Morena Silva, psicopedagoga y miembro del equipo de profesionales del Hogar, contó detalles de la experiencia.
- ¿En qué consiste el encuentro entre los abuelos y los perros del refugio municipal?
- La idea es llevar a cabo este taller una vez por mes. La persona encargada del refugio conoce bien a los perros y elige cuáles traer al Hogar, acorde al carácter del animal. Como están haciendo días lindos, salimos a la parte del patio de adelante con el mate y algo para comer y se suman a la actividad los adultos que quieren y aquellos que les gustan los animales. Entonces vamos al patio, hacemos caminar a los animales, buscamos que tengan contacto visual y físico con los adultos, etcétera. La intención es que sea una estimulación tanto para los adultos como para el animal.
- ¿Qué repercusiones tuvo la primera experiencia?
- Hasta ahora hicimos un solo encuentro y el próximo creemos que será la semana próxima, estamos terminando de organizarlo porque también tenemos el festejo por el día de la primavera. Al primer taller vinieron cuatro perros y participaron muchos abuelos, cerca de treinta. Estaban felices. Se les contó la historia de cada animal a quienes quisieron saber y entonces los acariciaban, agarraban las correas. Los animales que vinieron están en adopción y logramos que una familia se lleve uno, además, a raíz de este taller, una abuela pudo traer a su perrita caniche de catorce años a vivir con ella al hogar, se habían separado cuando la señora tuvo que dejar su casa. Se generaron cosas muy buenas.
- ¿Qué condiciones tienen que reunir los perros que participan del taller?
- Los perros tienen que ser dóciles con las personas y con otros animales porque en el hogar hay dos mascotas. Entonces la idea no es que se arme lío sino que se viva un rato de armonía, así que las chicas del refugio seleccionan a los perros por el carácter que tiene cada uno.
- ¿Cuánto tiempo dura la intervención?
- El otro día estuvimos más de dos horas con los perros. En general intentamos que los talleres duren una hora, una hora y media, porque los abuelos después se cansan, tienen un rato de atención a pleno y después ya se quieren ir tranquilos a su lugar. Hay talleres de cocina, yoga, porcelana fría, gimnasia, recreación y participan muchos abuelos. A veces van unos, otras veces otros, según las ganas que tengan, la idea de que haya tantos talleres es que puedan elegir en cuál participar.
- ¿Superó las expectativas la primera experiencia con perros?
- Esta experiencia superó nuestras expectativas porque, si bien había una mascota en el hogar, no sabíamos cómo iba a salir; además hubo aceptación por parte de los familiares. Ahora queremos implementar una salida para que los abuelos saquen a pasear a los perros y luego veremos si se suman perros de familiares o vecinos pero en primera instancia lo hacemos con animales del refugio municipal, porque las mascotas que tenemos en casa no están carentes de amor ni de paseos. Entonces la idea es hacerlo con los del refugio.
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