Samuel Uharte tiene 27 años y vive en Martínez de Hoz.
Samuel Uharte tiene 27 años y vive en Martínez de Hoz.
DIVERSIDAD DE GÉNERO

“Soy un chico trans y me siento orgulloso de lo mucho que logré en mi vida”

Samuel Uharte tiene 27 años y vive en Martínez de Hoz. Luego de una dura infancia, encontró trabajo gracias al cupo trans municipal y accedió, por primera vez, a una obra social. Hoy, sueña con mudarse a Lincoln, formar una familia y convertirse en papá.

Hace tres años atrás, Samuel Uharte decidió hacer una revelación en su cuenta de Instagram: “Qué linda sensación es sentirse libre. Libre de ser, vivir, elegir. Soy un chico trans y me siento orgulloso de lo poco y mucho que logré en mi vida. Para la mayoría siempre seré una chica como mi DNI lo afirma y no me siento mal por no haber nacido como me hubiera gustado ser. Hoy decido ser Samuel y espero que me traten como tal.

No espero que lo entiendan, imagínense cuánto me costó aceptarme en un cuerpo diferente y el cual no me definía”. Así se paraba frente a esta nueva persona que quería ser. Tenía apenas 24 años, pero desde los 10 no se sentía cómodo con ser mujer. 

Nacido en Martínez de Hoz, una pequeña localidad del partido de Lincoln, Samuel se crió en una familia tradicional junto a su mamá, su papá de crianza y sus seis hermanos. “Mi historia arranca desde muy chico.

Me crié en el campo, siempre atrás de mis hermanos varones y aunque mi mamá me compraba muñecas y vestidos, nunca quería jugar con ellas”, relató el joven y agregó “no me gustaban esas cosas, me sentía totalmente incómodo y cuando empecé la escuela comenzaron las complicaciones, porque toda la vida fui un varoncito y no entendía eso de las nenas con las nenas y los nenes con los nenes”. 

Así, contó que un día su mamá tuvo que recurrir a la escuela para hablar con la docente y pedirle que limitaran su conducta a “cosas de nena”. Pretendía que le explicaran qué cosas era de una mujer y qué actitudes eran de varones.

“La maestra le dijo que no podía exponerme frente a mis compañeros y que no era la persona indicada para hacer eso. Mi mamá se llevó una respuesta que no esperaba. Nunca logró aceptar mi decisión”, sostuvo Uharte y contó que recién cuando ella falleció pudo comenzar su verdadera transición. 
En cuanto a su papá, reveló que “murió hace mucho tiempo, pero a mi padre de crianza es al que más le cuesta aceptarme.

Dice que me criaron a la antigua, pero con valores y yo a eso no lo niego, porque en definitiva gracias a eso, soy quien soy, pero mi identidad pasa por otro lado”, y agregó “mis hermanos creo que se la veían venir, siempre me vieron como un bicho raro, pero gracias a toda mi lucha y a todo lo que conseguí, hoy me respetan muchísimo”. 

Cupo Trans

En ese sentido, explicó que gracias a su publicación en las redes sociales pudo tomar el impulso necesario para comenzar una nueva vida y sentirse liberado. Comenzó con su tratamiento hormonal y luego de un tiempo pudo tramitar su DNI y partida de nacimiento nueva. “Estoy todo legal”, aclaró entre risas. Pero antes, tuvo que atravesar cosas muy duras, como abandonar a su familia e irse a vivir a un pueblito de 9 de Julio para sentirse tranquilo y vivir a su manera. 

Luego, contó que “cuando dije ser Samuel, automáticamente encontré trabajo acá en Martínez de Hoz y empecé a hacer el curso de barbero. Me volví para el pueblo, me dieron el cupo trans y me quedé acá”, y aseguró que por primera vez cuenta con obra social, que puede utilizar para su tratamiento y un trabajo en blanco. 

Al respecto, relató que cuando comenzó con el tema de su identidad estaba viviendo en Quiroga, entonces cuando la oficina de Diversidad de Lincoln vio mi posteo, enseguida se contactaron para ofrecerme trabajo y para que estuviera en mejores condiciones. “Conocí mucha gente que me podía ayudar. A Vida Moreno le tengo que agradecer muchísimo. Porque si no hubiese sido por ella muchas cosas no hubieran sucedido”, confesó Samuel. 

Nuevas generaciones

En cuanto al avance de la sociedad y la crianza de las nuevas generaciones, Samuel sostuvo que hoy ve muchísimos cambios y que eso puede ayudar a las personas a atravesar transiciones de una forma completamente distinta, con apoyo y sostén.

“Es re difícil vivir en un cuerpo que no deseas o que te llamen por un nombre que no te sienta cómodo, por eso es importante escuchar a las infancias y prestar atención en lo que les pasa por dentro”, expresó y agregó “cuando vos venís de una familia que fue criada a la antigua, que no tiene formación y que, además, es bastante cerrada, se complican las cosas. Siempre pienso en lo distinto que hubiera sido todo si mis padres me hubieran apoyado y comprendido”. 

Su futuro

Actualmente, Samuel vive en Martínez de Hoz, pero su idea es partir pronto a Lincoln. Allí vive su pareja y sueña con transformarse en padre en algún momento de su vida. “Soy muy de vivir el día a día. Mi sueño más grande es ser papá, pero por ahora soy muy buen tío”, aseguró y afirmó que primero quiere conseguir un lugar estable para vivir y buenas condiciones.

“De chico la pasé muy mal, rodé muchos por todos lados, entonces no quiero traer una vida al mundo en esas mismas condiciones, quiero tener mi casa y después mi familia”, confesó y aseguró “me gustaría que mi historia sirva para visibilizar y ayudar a otras personas que estén pasando por una situación similar.

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