En Educación, cada etapa que se cumple tiene bienvenidas y despedidas, tanto para los docentes como para los alumnos; inexorablemente se van unos y llegan otros. Se supone que es parte del desafío: para unos, los docentes, de la vocación que eligieron, y para otros, los alumnos, del crecimiento y desarrollo.
El Centro Cultural Arturo Jauretche tuvo todo eso, porque los chicos de preescolar egresaban y pasaban a otra instancia, con menos juegos tal vez, pero con mucho que aprender todavía. Había mucha gente, todos ansiosos con los celulares en mano para fotografiar a los niños.
También estaban las autoridades municipales, el intendente Carlos Ferraris; la secretaria de Gobierno, Nancy Grimaldi; el director de Cultura, Rubén Ghío; el de Deportes, Martín Peacan; funcionarios educativos, como la inspectora jefa distrital Mavi Sábato y la consejera general de Cultura y Educación Natalia Quintana; inspectores y representantes de otras escuelas de todos los niveles.
Las que condujeron el acto fueron las docentes Marisa y Romina, quienes fueron enumerando las numerosas salutaciones recibidas, para luego dar paso a la Promoción 2024, que fueron subiendo al escenario muy serios (les duró poco). Llegaron los nuevos abanderados, que recibieron las enseñas de sus anteriores portadores, y todos juntos entonaron el Himno Nacional.
Se dirigió luego a los presentes LorenaTaminioli, que despidió cariñosamente a los chicos recreando los años compartidos entre cuentos, juegos y mimos, augurándoles a la vez lo mejor para las etapas subsiguientes, y agradeciéndoles también lo que ellos dieron a sus maestras. “Los espera una nueva historia”, cerró emocionada.
Verónica Peralta, la directora del Jardín, por su parte, definió el momento como de reflexión, agradecimiento y proyección, en el que el objetivo fue enseñar y que cada uno tuviera algo que aprender.
Resaltó a la Educación como un derecho humano fundamental, que debe estar siempre garantizado, con docentes comprometidos construyendo su tarea cotidiana. “El Jardín tiene que ser un lugar donde los niños quieran estar”, destacó.
Orgullosa del diseño curricular democratizado que se logró, agradeció especialmente a las familias, que son vitales para colaborar y participar, y a la comunidad toda porque, como señaló, “los logros son imposibles si se trabaja en soledad”.
Hizo saber que los chicos eran quienes habían realizado la hermosa decoración del escenario, inspirada en el arte de Martín Villalba, y cerró con “enseñar es la forma más amorosa de cuidar”.
A su turno, el intendente Ferraris hizo uso de la palabra, saludando especialmente a las familias de los educandos y felicitando a los docentes y auxiliares del Jardín 901, y lo hizo extensivo a todas las 48 instituciones educativas del distrito.
La inspectora jefa distrital Mavi Sábato destacó la cantidad de chicos que egresaban, 59 en total, lo que marca a las claras la excelencia de la institución al ser tan elegida.
Al mismo tiempo, señaló la necesidad de poner en valor el trabajo realizado en este año -que calificó de intenso-, con muchas reuniones para que cada día fuera enriquecedor y generador de mejoras.
COMENTARIOS