Esta normativa prohíbe la fabricación, venta, instalación y uso de caños de escape sin silenciador en todo el distrito. La nueva disposición también contempla el secuestro de vehículos como automóviles, ciclomotores, motocicletas, cuatriciclos y triciclos estacionados en la vía pública que carezcan de chapa patente, presenten un escape no original, o generen ruidos perturbadores por aceleración u otros mecanismos.
Además del secuestro, se aplicarán multas económicas que varían entre dos y cinco salarios mínimos municipales. Las infracciones cometidas por menores de edad serán responsabilidad de los adultos responsables.
En este marco, Mittelbach, expresó: “La tranquilidad de los ameghinenses no se negocia. Con esta nueva reglamentación buscamos proteger el bienestar de los vecinos y garantizar que puedan disfrutar de una ciudad tranquila y segura”. “Los ruidos excesivos afectan a todos, pero su impacto es especialmente negativo para las personas con discapacidad y los animales, quienes pueden sufrir consecuencias graves debido al estrés y malestar que causan estos sonidos”, afirmó.
En el mismo sentido, el Jefe Comunal resaltó: “Esta ordenanza es una respuesta directa a las demandas de la comunidad y a nuestra responsabilidad de crear un entorno más respetuoso y habitable. Nos comprometemos a hacer cumplir esta normativa con rigor para asegurar que todos los ciudadanos, incluidos los más vulnerables, puedan disfrutar de su entorno en paz”.
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