MOVIMIENTOS EN EL OFICIALISMO
Evalúan lanzamiento de Scioli a la presidencia del PJ bonaerense
Con internas convocadas para el 15 de diciembre, el cierre de listas vence en una semana.
Un grupo de los “caciques” del PJ provincial empuja una candidatura del Gobernador para que asuma la conducción del partido.
Daniel Scioli, que acabó convirtiéndose en la cara más visible de la campaña de Martín Insaurralde, asoma para ese grupo -integrado por intendentes y jefes territoriales-, como “el único capaz de lograr consenso para evitar un escenario de peleas internas entre los distintos sectores del peronismo kirchnerista en la Provincia”.
Concentrado ahora en las negociaciones para que la Legislatura sancione el Presupuesto, el Gobernador todavía no ha dado ninguna señal sobre si aceptará presentarse como candidato a presidente del partido en las elecciones convocadas para el próximo 15 de diciembre. Pero el reloj corre.
El martes de la semana que viene vence el plazo para la presentación de las listas, según la convocatoria que firmó el intendente Hugo Curto como presidente de la Junta Electoral partidaria. Habrá, luego, un período de dos semanas para posibles impugnaciones.
Y el domingo 15 de diciembre, el millón y medio de afiliados del PJ bonaerense deberán elegir por voto directo un presidente del Consejo provincial, cargo que hoy es ejercido de manera interina por la ministra de Gobierno bonaerense Cristina Álvarez Rodríguez.
Además se deberán elegir consejeros por las secciones electorales, por las ramas sindical, de la juventud y femenina, 48 en total; el grupo de mando de la estructura partidaria en tiempos signados por amenazas de tormentas internas.
En la práctica, la actividad en el PJ provincial se encuentra virtualmente paralizada desde el accidente cerebrovascular de Alberto Balestrini en abril de 2010. La presidencia provisoria pasó a Hugo Moyano y, tras su renuncia, quedó en manos de Cristina Álvarez Rodríguez.
Pero todos los mandatos caducaron hace un año y medio, las elecciones se postergaron ya dos veces desde entonces y la justicia electoral dictaminó la caducidad partidaria, una medida “frenada” por la promesa de renovación de conducción antes de que termine el año. Así, apremiado por el calendario, Scioli convocó a los intendentes del FpV a un almuerzo “político” el miércoles en la Gobernación.
Daniel Scioli, que acabó convirtiéndose en la cara más visible de la campaña de Martín Insaurralde, asoma para ese grupo -integrado por intendentes y jefes territoriales-, como “el único capaz de lograr consenso para evitar un escenario de peleas internas entre los distintos sectores del peronismo kirchnerista en la Provincia”.
Concentrado ahora en las negociaciones para que la Legislatura sancione el Presupuesto, el Gobernador todavía no ha dado ninguna señal sobre si aceptará presentarse como candidato a presidente del partido en las elecciones convocadas para el próximo 15 de diciembre. Pero el reloj corre.
El martes de la semana que viene vence el plazo para la presentación de las listas, según la convocatoria que firmó el intendente Hugo Curto como presidente de la Junta Electoral partidaria. Habrá, luego, un período de dos semanas para posibles impugnaciones.
Y el domingo 15 de diciembre, el millón y medio de afiliados del PJ bonaerense deberán elegir por voto directo un presidente del Consejo provincial, cargo que hoy es ejercido de manera interina por la ministra de Gobierno bonaerense Cristina Álvarez Rodríguez.
Además se deberán elegir consejeros por las secciones electorales, por las ramas sindical, de la juventud y femenina, 48 en total; el grupo de mando de la estructura partidaria en tiempos signados por amenazas de tormentas internas.
En la práctica, la actividad en el PJ provincial se encuentra virtualmente paralizada desde el accidente cerebrovascular de Alberto Balestrini en abril de 2010. La presidencia provisoria pasó a Hugo Moyano y, tras su renuncia, quedó en manos de Cristina Álvarez Rodríguez.
Pero todos los mandatos caducaron hace un año y medio, las elecciones se postergaron ya dos veces desde entonces y la justicia electoral dictaminó la caducidad partidaria, una medida “frenada” por la promesa de renovación de conducción antes de que termine el año. Así, apremiado por el calendario, Scioli convocó a los intendentes del FpV a un almuerzo “político” el miércoles en la Gobernación.