El frustrado debate del Presupuesto bonaerense dejó a los municipios sin la posibilidad de contar con recursos extra de libre disponibilidad aportados por la Provincia. La autorización para tomar deuda que buscaba el Gobierno había abierto una negociación para que parte de esos fondos se destinaran a las comunas. Pero como no hubo acuerdo, ahora esos recursos no están garantizados.
Esa cuestión será eje del debate que animarán el martes 25 en La Plata los intendentes del radicalismo, que aparecen atrapados entre las necesidades financieras de sus distritos y una interna partidaria sin resolución efectiva que de alguna forma entorpece el diálogo con el gobierno de Kicillof.
“El Foro tienen que definir quién es el interlocutor con Kicillof”, dijo ayer uno de los alcaldes que cantará presente en el cónclave platense. Se sabe que han existido charlas con Miguel Fernández, quien en principio resultó electo presidente del Comité Provincia. Pero la Justicia, que interviene en la definición de esa interna entre el sector de Maximiliano Abad y Martín Lousteau, no dijo la última palabra. En ese marco, los intendentes radicales buscarán definir una estrategia con la idea de hablar con el Gobierno respecto de la forma de garantizarse recursos.
Hace algunas semanas trascendió que el Ejecutivo buscaría que ambas cámaras le voten una autorización para tomar deuda en pesos por el equivalente a 1.200 millones de dólares, el mismo monto que no pasó por el filtro legislativo en medio de la disputa abierta en el propio oficialismo y con la oposición.
Parte de esa deuda sería utilizada para crear un fondo de recursos para los municipios. Cuando se trabó la discusión a finales del año pasado, la oposición y sectores del peronismo querían que fuera del 16 por ciento del total que se iba a autorizar. Kicillof, en ese momento, se había plantado en un máximo del 10%.
Los intendentes buscarían ahora reflotar esa asignación. No parece fácil, en medio de las tensiones que quedaron tras el debate frustrado.
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