La decisión del intendente radical de Tandil, Miguel Lunghi, de abandonar el sistema de fases dispuesto por el Gobierno bonaerense, para adoptar un sistema propio para contener la propagación de coronavirus, generó el rechazo de funcionarios provinciales, entre ellos, el jefe de Gabinete, Carlos Bianco, quien le pidió al jefe comunal "reflexionar" y dar "marcha atrás" con la medida.
"Parecería la república separatista de Tandil", dijo el jefe de Gabinete provincial sobre la medida anunciada por Lunghi de dejar de lado el sistema de fases dispuesto por la administración de Axel Kicillof para habilitar las actividades en los 135 municipios bonaerenses.
Bianco llamó al jefe comunal de Juntos por el Cambio "a reflexionar" y "dar marcha atrás con la medida", en medio del crecimiento exponencial de casos de Covid-19 en el país y le advirtió que de avanzar en su decisión "va a estar desobedeciendo decretos nacionales y provinciales".
El funcionario formuló esas declaraciones al encabezar en La Plata, junto al ministro de Salud, Daniel Gollán, y su vice, Nicolás Kreplak, la habitual conferencia de prensa de los lunes para informar detalles sobre la situación epidemiológica en la provincia de Buenos Aires.
Bianco dijo que en la administración bonaerense recibieron la noticia de la decisión tomada en Tandil "con mucha preocupación" y recordó que el sistema de fases que rige en la Provincia "no es un capricho" sino un mecanismo de trabajo que se desarrolla desde hace meses "con el consenso de todos los intendentes".
Luego, analizó que es una "falsedad" que el intendente haya adoptado esa decisión tras acordarlo "con todos los tandilenses", como dijo, ya que "no consultó a la oposición, que sacó el 40% de los votos, ni al Colegio de Médicos, ni a la universidad".
En ese sentido, Bianco le advirtió al intendente radical que de avanzar en su decisión "va a estar desobedeciendo decretos nacionales y provinciales, lo que es grave desde el punto de vista legal" y le pidió evitar una situación de "anarquía o desorden".
"No le veo el sentido a esta medida, más que un aprovechamiento político. Si va a dejar de depender de la Provincia, que lo haga de manera completa y deje de depender de los recursos provinciales", apuntó.
Recordó que, en los últimos meses, la administración bonaerense asistió a Tandil "con 147 millones de pesos adicionales a la coparticipación para mejorar sistema de salud y compensar la caída de la recaudación".
Los cuestionamientos del Gobierno provincial se dieron luego de que Lunghi anunciara hoy que Tandil "establece un modelo propio que tiene en cuenta las características y particularidades" de esa ciudad y que la decisión fue "consensuada con los principales actores de los sectores representativos de la comunidad, que han adherido de manera formal con su firma y compromiso a la propuesta".
"Estamos ante un gran acuerdo entre todos los sectores de Tandil para establecer un nuevo modelo integral, planificado, ordenado y previsible, porque sabemos claramente que durante muchos meses más deberemos convivir y enfrentarnos a esta pandemia", sostuvo el jefe comunal en un comunicado.
Precisó que el sistema propio de administración del aislamiento contempla "criterios objetivos" en relación a "estadísticas semanales que tomen en cuenta diversos factores de la situación sanitaria y del sistema de salud local".
Siempre en base a esos indicadores, explicó, se "establecerán los momentos en que haya que disponer de restricciones, cierres de actividades o de la circulación, así como las etapas de apertura o extensión de rubros".
Para ello establece tres estadíos similares a los de un semáforo: rojo, amarillo o verde en los cuales fija las actividades que se encuentran habilitadas y el factor ocupacional que tienen permitidos los locales y gimnasios, entre otros comercios.
Tandil, situada a unos 300 kilómetros de la ciudad de Buenos Aires, se encontraba en Fase 5, con la casi totalidad de las actividades habilitadas, pero el 23 de agosto pasado debió retroceder a Fase 4, debido a que tuvo un incremento de casos de Covid-19.
El intendente indicó que la ciudad turística se encuentra en el estadío amarillo del nuevo sistema, ya que, de acuerdo al último parte, Tandil tuvo desde el inicio de la pandemia 260 casos, de los cuales 145 permanecen activos y registró un fallecido.
La decisión del jefe comunal fue cuestionada también por el ministro de Salud provincial, Daniel Gollán que precisó que 13 de las 25 camas de UTI que existen en Tandil están ocupadas y dijo que se registra "circulación comunitaria del virus".
"Si se llegan a saturar las camas, la Provincia va a seguir ayudando a Tandil. Nos interesa la población y la salud. Si por esta decisión separatista y poco solidaria se llegan a quedar sin camas, la Provincia va a estar para que a ningún tandilense le falte atención", precisó.
En la misma sintonía se pronunció la ministra de Gobierno bonaerense, Teresa García, quien calificó de "inconsulta y absolutamente irresponsable" la resolución del intendente.
"Hay distritos que tomaron decisiones propias, como Tandil que se desacopló de las decisiones de la Provincia y de Nación sin mirar que no es una ciudad amurallada, sino que pertenece a una región y a una provincia", señaló García.
BUENOS AIRES
El intendente de Tandil abandona el sistema de fases: desató críticas del Gobierno provincial
"Parecería la república separatista de Tandil", dijo el jefe de Gabinete, Carlos Bianco, sobre la medida anunciada por Miguel Lunghi de dejar de lado el sistema de fases dispuesto por la administración de Axel Kicillof para habilitar las actividades en los 135 municipios bonaerenses.
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