Dos hombres y una mujer fueron detenidos acusados de integrar la denominada “banda de los youtubers” que, además de tener un canal de terror extremo en esa plataforma, vendían marihuana prensada de alta calidad, cocaína, éxtasis, LSD y psicofármacos a través de la modalidad “take away” en una casa detrás del cementerio de la localidad bonaerense de San Isidro.
Fuentes policiales y judiciales informaron que en el procedimiento se secuestraron 15 kilos de marihuana, casi uno de cocaína, decenas de dosis de éxtasis y LSD, medicamentos y hasta un arma de fuego.
La especialidad de la organización era la venta de marihuana premium en dos variedades: por un lado, las "flores", diez veces más caras que las hojas; y por el otro, la "creepy", prensada con un efecto más potente, intenso y duradero, según explicó una fuente de la investigación.
Se trata del resultado de una investigación de cuatro meses encabezada por el fiscal de Drogas Ilícitas de Tigre, Federico González, y efectivos de la comisaría 4ta. de Benavídez.
El allanamiento fue realizado en horas de la madrugada en un domicilio de la calle Intendente Becco 676 de San Isidro, detrás del cementerio municipal y a dos cuadras del hospital materno infantil de ese partido del norte del Conurbano. Allí se detuvo a tres imputados: dos hombres de 43 y 48 años y una mujer de nacionalidad paraguaya de 23.
Los investigadores bautizaron a la organización como “La banda de los youtubers” porque el acusado de 43 años tiene un canal en esa red social llamado “Terror y miedo reales” con más de 32.000 suscriptores, donde sube videos sobre sitios, situaciones y personajes misteriosos, terroríficos o paranormales.
Extensa investigación
La investigación se inició el 20 de enero cuando en un procedimiento de rutina efectivos del Centro de Operaciones de Tigre (COT) detuvieron en Benavídez a dos jóvenes, a quienes les secuestraron en una mochila en cuyo interior había unos 100 gramos de marihuana.
El fiscal González inició una causa por tenencia simple de estupefacientes, pero profundizó la investigación y a partir del análisis de los celulares de los detenidos, pudo obtener datos de los proveedores de esa droga.
En ese momento, la organización trabajaba con la modalidad "delivery" y contactaba a sus clientes por redes sociales y hasta distribuía la lista de precios de las drogas que comercializaba por WhatsApp.
Pero desde que el 20 de marzo se decretó el aislamiento social, preventivo y obligatorio por el coronavirus, la banda buscó alternativas para seguir distribuyendo sus drogas y mutó a la modalidad "take away".
"Se ordenaron tareas encubiertas y en esta época de cuarentena tenemos filmados videos con cámara oculta de autos y camionetas de alta gama pasando a buscar las drogas por la puerta de esta casa", contó una fuente judicial.
Allanamiento con 3 detenidos
Tras cuatro meses de inteligencia y seguimientos, los pesquisas lograron identificar a los integrantes de la organización y reunir la prueba necesaria para realizar el allanamiento que culminó con las detenciones y el secuestro de las drogas.
Las fuentes detallaron que en la casa de la calle Intendente Becco, los policías de Tigre y de la Superintendencia de Seguridad Región AMBA Norte Ie secuestraron 12 ladrillos de marihuana de un kilo cada uno, tres bolsas con casi cinco kilos de flores de marihuana, 120 envoltorios de nailon con cinco gramos de cocaína cada uno, otros 300 gramos de la misma droga en tapers, 52 dosis de LSD troqueladas, 70 pastillas de éxtasis de diversos colores y más de 80 blisters de distintos medicamentos.
Además, los policías se incautaron de un rifle tipo carabina calibre 22, más de 20 celulares, ocho tablets, 12 notebooks, cuatro balanzas de precisión y elementos de corte y fraccionamiento de las drogas. Los tres detenidos quedaron a disposición del fiscal González en el marco de la causa por caratulada como “comercialización de estupefacientes”.
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