Gastón Fossati, director de ARBA, aseguró que “al retomar sus planes caídos, los contribuyentes podrán cancelar deudas tributarias en condiciones favorables”.
En ese sentido, destacó que “el monto total a pagar por el programa rehabilitado siempre será inferior a cualquier otra alternativa de regularización de esa deuda”.
La posibilidad de reingresar a los planes caducos había sido abierta por la Provincia en diciembre pasado, con el objetivo de beneficiar a ciudadanos y empresas que enfrentaban dificultades para cancelar sus deudas impositivas.
Quienes se reincorporen a un plan caído deberán abonar, antes del 1° de junio, las cuotas vencidas e impagas –actualizadas– que produjeron la caducidad. En tanto que, si todavía hubiese algunas cuotas sin vencer del programa rehabilitado, podrán ser canceladas en las fechas previstas originalmente.
La rehabilitación abarca a los regímenes de regularización de deuda otorgados por la Provincia desde el 1° de enero del año 2000, cuya caducidad haya operado hasta el 15 de noviembre de 2018, inclusive. Pero no comprende a los planes caducos de la Ley N°14890, referida a los agentes de recaudación.
Para favorecer esta posibilidad de retomar antiguos programas de regularización, en diciembre pasado la Provincia había resuelto suspender la emisión de títulos ejecutivos destinados a cobrar, en instancia judicial, las deudas originadas por la falta de pago de esos planes.
Esta suspensión, que también rige hasta el 31 de mayo, permitió que los contribuyentes con deuda no sufriesen embargos e inhibiciones, facilitando el reingreso a planes vencidos y la oportunidad de regularizar su situación con ARBA en condiciones beneficiosas.
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