El Defensor del Pueblo de la Provincia instó días atrás a las autoridades comunales bonaerenses a que prohíban el uso de pirotecnia en sus distritos y ahora ingresó a la Cámara de Diputados provincial un proyecto que busca lo mismo: terminar en la Provincia con la comercialización, venta, distribución, tenencia y uso de cualquiera de los típicos elementos explosivos que se utilizan para los festejos.
La campaña, iniciada hace algunos años, para acabar con la antigua costumbre de encender petardos, cañitas voladoras y fuegos artificiales va consiguiendo, poco a poco, un mayor compromiso de la gente y lo cierto es que en esta Navidad disminuyeron notablemente los clásicos estruendos de fin de año.
Con la iniciativa, que se presentó en pleno contexto ya de los festejos de fin de año, se busca que la Cámara baja dé media sanción al proyecto de erradicar por completo el uso de pirotecnia sonora tanto público como privado, en todo el territorio bonaerense.
Impulsada por el legislador Avelino Zurro (Unidad Ciudadana) tiene como objetivo proteger a todas las personas que posean sensibilidades auditivas y/o cognitivas especiales, las cuales ven afectadas su salud ante cada una de las detonaciones de los artefactos pirotécnicos. Se incluye en este padecimiento a niños y adultos con determinadas patologías, como Síndrome de Down y Trastorno del Espectro Autista (TEA), entre otras.
Advertencia por los niños con autismo
El Colegio de Fonoaudiólogos bonaerense advirtió sobre las consecuencias del uso de fuegos artificiales que afecta a pacientes con TEA. Familias que sufren juntos con sus hijos, mientras otros "festejan" a puro ruido.
En un comunicado manifestaron que "el uso de la pirotecnia tiene cada vez más contraindicaciones. Y el impacto más doloroso y triste recae sobre las personas con autismo, especialmente en niños. Son ellos quienes en épocas festivas como las celebraciones de navidad o Año Nuevo padecen los efectos de los artículos de explosión y fuegos artificiales porque tienen un sistema auditivo con alta sensibilidad".
"Sabemos de casos puntuales de familias enteras que para las fiestas de fin de año, no pueden disfrutar ni festejar al tener que contener a sus pequeños que entran en estado de pánico. Por eso es importante concientizar a la población para que todos podamos tener unas fiestas felices", dijo Alejandra Morchón, presidente del Cofolp.
"La mayoría de las personas con trastorno del espectro autista (TEA) presentan dificultades de procesamiento sensorial, por eso pueden llegar a presentar alteraciones en los sistemas sensoriales ( procesamiento de estímulos visuales, táctiles, gustativos, olfativos, auditivos, propioceptivos y vestibulares); frente a estas dificultades de desorden sensorial responden a veces disruptivamente, percibiendo estos estímulos como algo realmente muy estresante y desorganizador", explicó la especialista Giselle Prado, consultada para esta nota por las autoridades de la Comisión del Lenguaje del Cofolp.
"El sonido de una ambulancia, la música fuerte en un ambiente, los ruidos ocasionados por cohetes, entre otros provoca reacciones en estos pacientes: desde taparse los oídos o manifestar oralmente su molestia hasta llegar a presentar un malestar tan importante que les impida permanecer en el espacio y hasta a veces llegar a autolesionarse por no poder auto regularse", agregó la fonoaudióloga.
COMENTARIOS