A la banda le adjudican el asalto a un jubilado: una cámara tomó al nieto cuando salió a defenderlo.
HAY OTRO EFECTIVO INVESTIGADO

Dicen que un policía de la Bonaerense llevaba ladrones a robar en la patrulla

Se trata de un subteniente, quien fue apartado por Asuntos Internos, y se investiga si “liberó” zonas y entregó armas a menores de edad en una secuencia de al menos 20 asaltos entre junio y julio.

“Lo llevaba a robar en el patrullero. Los hacía esconder en el asiento de atrás del móvil y así los dejaba en la zona donde tenían el dato de que podían llevarse plata y un auto”, contó un investigador sobre la derivación más llamativa de la sucesión de robos de autos, en casos a punta de pistola, que se registró en algo más de un mes en Tolosa y Ringuelet, en inmediaciones de la ciudad de La Plata. Esos hechos podrían estar ligados a una banda mixta en la que un grupo de adolescentes habrían sido la mano de obra de policías encargados de proveerles la logística, los traslados y “los fierros” para asaltar a vecinos desprevenidos.
Así quedó establecido en la resolución de la Administración General de Asuntos Internos de la Policía Provincial que ordenó la desafectación de un subteniente del Comando de Patrullas, identificado como C.L., al determinarse “prima facie”, en el proceso investigativo de estos hechos, que “se encontraría vinculado a una banda delictiva a la que proveería de municiones. Así mismo, en circunstancias en las que prestaría servicios en el Comando de Patrullas de La Plata, liberaría la zona para la perpetración de hechos a cambio de dinero”.
Las actuaciones del organismo dedicado a analizar la conducta de los policías derivaron en la presentación de una denuncia ante la Justicia Penal Platense. Los indicios recogidos en la investigación que se inició con datos recogidos por los policías de la comisaría sexta, podrían derivar en un nuevo sumario contra otro oficial, cuyo asiento se mantiene en reserva hasta el momento.
Entre las víctimas de la secuencia de más de 20 robos estuvo un jubilado de Ringuelet, a quien lo atacaron a tiros el 8 de julio, frente a su casa de 518 entre 6 y 7. El caso tomó estado público porque ante la violencia reaccionó su esposa. También su nieto de 12 años, quien corrió a los jóvenes ladrones con un palo.
El Comando de Patrullas platense ya fue sacudido recientemente, con la detención del comisario inspector Gustavo Burzstyn, a quien se investiga por su presunta participación en otra banda mixta de policías y civiles que habría cometido una serie aún indeterminada de delitos. Entre otros hechos, se analiza la presunta vinculación con el asesinato de Juan Farías, un ex convicto ejecutado de tres tiros en el hall del edificio donde vivía, en 2010, con su pareja y una hija.
Al subteniente C.L. se lo investiga por “pasar del otro lado del mostrador” para integrar una presunta asociación con “La Banda del Gordo Martín”, que lideraba un adolescente de 17 años afincado en el Barrio Nuevo de El Mercadito, situado entre el Mercado Regional, el Arroyo Del Gato y las vías del Ferrocarril Roca.

Los días pares
En medio de la notoria secuencia de robos de autos desatada en un periodo de entre cuatro y seis semanas, entre junio y julio, al comisario Claure y sus investigadores de la comisaría sexta de Tolosa llamó la atención que hubiera una concentración de hechos en los días pares. En Asuntos Internos ahora se sostiene que el “sinnúmero de robos de motos y autos en junio y julio se daba en los días pares, en los que C.L. trabajaba en calle”.
Siguiendo la hipótesis del sumario, el subteniente tendría manejo de las zonas a las que acudían las patrullas del Comando. “Las comisarías no tienen el manejo del patrullaje. Entonces, ellos indican por dónde deben andar y son los primeros que llegan cuando se produce una emergencia. Por ejemplo, si alguien roba un auto y lo abandona, el primer registro de la escena lo tiene el móvil del Comando”, aclaró un policía de Tolosa. Ahora, se busca determinar si como se sospecha, los ladrones realizaban robos de autos en cadena con la finalidad de “dejar en la guantera del que abandonaban la plata de un asalto para que la levante el policía para el que robaban”, indicó el pesquisa.
La “banda” integraba a chicos de 17, 16 y hasta 13 años. Entre los datos que abrieron la puerta al caso, están versiones cruzadas que mencionaban al “pelado” como su jefe. Según las fuentes consultadas, el pelado se vestía de azul.