Bazán debe volver a explicar cómo obtuvo la tijera que lo compromete

Los perros primero identificaron el lugar donde estuvo Anahí Benítez antes de aparecer muerta en un descampado y ahora apareció una tijera, dos pruebas que comprometen a Marcos Bazán (34) como el autor del crimen de la adolescente, de acuerdo a la investigación de dos fiscales de Lomas de Zamora.
Los perros habían seguido el rastro desde la zona en donde apareció el cuerpo, el 4 de agosto, en la reserva Santa Catalina, hasta el lugar donde vive Bazán. El viernes, el testimonio del mejor amigo de la adolescente complicó más la situación del sospechoso, al asegurar que la tijera secuestrada en poder del sospechoso el día de la detención es suya y que se la había olvidado en la casa de la víctima hace seis meses. Eso probaría que Anahí estuvo en ese lugar, algo que el acusado siempre negó.
Bazán -uno de los dos detenidos en la causa, aunque el único acusado de homicidio- volverá a declarar este lunes. A pesar de las pruebas en su contra, sus familiares y amigos lo siguen apoyando y el viernes se movilizaron hasta el hall central de la estación de Constitución para pedir su libertad.
Ya había trascendido que uno de los objetos obtenidos en los allanamientos de la casa de Bazán tenía vital importancia para la causa. Ese objeto no era ni las plantas de cannabis, ni los hongos que cultivaba Bazán, ni las prendas y los cabellos de mujer. Era una tijera que tenía un nombre de varón. Cuando fue indagado, Bazán aseguró que la había encontrado en una caja de objetos perdidos en un colegio de Lanús donde trabajó antes de su empleo actual como vigilador en el Hospital Gandulfo.
Sin embargo, un amigo de Anahí que tiene el mismo nombre que figura en la tijera, aseguró ante los investigadores que es suya. Para probarlo, el propio adolescente entregó a las fiscales la captura de pantalla del chat de WhatsApp en el que Anahí le decía “te olvidaste la tijera y un peine” y, además, aportó la foto que su amiga le envió de esos objetos con ese mensaje.
Bazán volverá a ser indagado este lunes y deberá aclarar si sostiene la versión que había dado con anterioridad sobre la tijera. Sin embargo, los investigadores descreen de esa versión. “La única manera de que esa tijera que desde febrero estaba en poder de Anahí apareciera en la casa de Bazán es que la chica estuvo en ese sitio”, dijo una fuente judicial. 
Hasta ahora, Bazán negó conocer a la víctima, aunque su abogado recalcó que su vivienda no tiene medidas de seguridad, por lo que puede ingresar cualquiera que camine por la reserva de Santa Catalina.