María Eugenia Vidal se reunió con Ricardo Alfonsín y le ofreció ser candidato a diputado nacional por la Provincia. El encuentro fue confirmado por fuentes oficiales y partidarias, que coincidieron en afirmar que el hijo del ex presidente agradeció la propuesta pero contestó que no estaba dispuesto a ir por la reelección.
La difusión del encuentro y la actitud de la Gobernadora generaron un profundo malestar en el radicalismo. Sus dirigentes, incluso el propio Alfonsín, ya venían renegando a cuenta ante la posibilidad de que el neurocientífico Facundo Manes fuera incluido en la nómina de diputados e imputado a uno de los tres lugares que reclama en esa nómina el centenario partido. La oferta de Vidal a Alfonsín, en forma directa y sin intermediarios, terminó por profundizar el malestar.
“Están ninguneando al partido”, bramaron varios dirigentes de la UCR, que insisten en que los nombres que surjan “tienen que ser definidos por la estructura partidaria”.
Los radicales pidieron en una reunión que hace varias semanas mantuvieron con el jefe de Gabinete bonaerense, Federico Salvai, tres lugares en esa nómina, para repartir entre los sectores con más influencia en el partido: el que lidera Daniel Salvador, el alfonsinismo y el grupo que se referencia con Ernesto Sanz. Reclaman que el PRO defina qué espacios tendrán para poder avanzar con los nombres propios. Aquella gestión reservada de Vidal para convencer a Alfonsín no sólo mete una cuña en esa estrategia, sino también descoloca a Salvador, presidente de la UCR bonaerense.
Cuentan que la mandataria, dispuesta a contener a Alfonsín -que en los últimos tiempos viene enarbolando posiciones críticas hacia medidas adoptadas por el Gobierno nacional y que además no disimula el apoyo a Martín Lousteau en capital federal-, le habría propuesto al todavía diputado desembarcar en una embajada. La propuesta, aseguran diversas fuentes, también habría sido rechazada por el dirigente radical.
En ese clima de fuerte tensión, los negociadores radicales volverán a reunirse la semana que viene con Salvai. Los que irán a la carga, además de Salvador, son el alfonsinista Carlos Fernández y el diputado cercano a Sanz, Maximiliano Abad.
TENSIÓN POR LAS CANDIDATURAS EN CAMBIEMOS
El radicalismo, en llamas por una oferta de Vidal a Alfonsín
Le propuso ser candidato, pero el hijo del ex presidente se negó: “Es una intromisión”, dijeron en la UCR.
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