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Cristina Kirchner y Florencio Randazzo; cada cual atiende su juego de cara a las PASO.
TRASTIENDA POLÍTICA

Cristina, Randazzo y la guerra de nervios en el PJ

La lógica de lo impensado es la herramienta que está utilizando Florencio Randazzo en esa guerra de nervios en la que se ha convertido la interna del peronismo bonaerense y que tiene, en el otro bando, a Cristina Kirchner y a sus talibanes. En el medio de ellos existe una troupe de intendentes justicialistas de la Provincia que están viendo en qué bando enrolarse.
Cristina es la que más intención de voto recoge en un eventual duelo intra peronista, según coinciden todas las encuestas conocidas. Una veintena de intendentes dice que jugará con ella si finalmente decide encabezar la boleta del PJ en las próximas elecciones legislativas. Es mucho, si se tiene en cuenta que el peronismo maneja más de medio centenar de municipalidades. 
Sin embargo, el ex ministro de Interior y Transporte insiste en desafiarla. Hasta ahora, le han jurado fidelidad ciega un número menor de jefes comunales. Se pueden contar con los dedos de una mano. Y, menos visible, un puñado de gremios que detesta a Cristina. Le cobran el destrato de sus ocho años como Jefa de Estado.
Ayer mismo, los hombres de Randazzo -Eduardo Di Rocco y Norberto García, especialistas en el tema legal, más Alberto Fernández- presentaron los avales necesarios para que la Justicia Electoral le conceda la chance de disputar una Primaria Abierta contra el cristinismo.
Se reitera: los números fríos que se conocen hasta hoy dicen que Randazzo perdería la PASO con la ex presidenta. Y sin embargo él porfía en ser candidato. El kirchnerismo está empezando a entender el dogma que se fijó el ex ministro en esta pelea. Lo parafrasea un hombre de su círculo cercano ante este diario: “Si el Flaco pierde la Primaria se va a su casa; si gana entierra al kirchnerismo y se queda con todo el PJ”.

Con la vista en 2019
Randazzo quiere ser el candidato a presidente del justicialismo en 2019. Sabe que difícilmente encuentre respeto interno si en la elección legislativa de este año no arriesga.
Cristina dijo la semana pasada, en una entrevista televisiva, que ella podría ser candidata en este turno si eso sirve para sellar la unidad del justicialismo bonaerense. Los randazzistas decodificaron bien esas palabras: la “unidad” es la no realización de Primarias. Para la ex presidenta, explican en el Instituto Patria, el sólo hecho de que se plantee la PASO implica un desafío a su liderazgo.
Randazzo será invitado hoy a una reunión de la mesa chica del peronismo provincial. Probablemente no esté presente esta tarde pero en esa mesa se sienta, a veces él mismo y otras a través de emisarios, Máximo Kirchner. Que es el principal operador político de su madre y es diputado por... Santa Cruz.

Dos versiones
Dos versiones se escuchaban ayer sobre lo que se planteará en ese cónclave, a realizarse en la sede nacional del PJ. Una: que Randazzo encabece la boleta de diputados nacionales del peronismo bonaerense, con CFK de postulante a senadora.
Y le darían al ex ministro la posibilidad de designar varios nombres en las listas de legisladores provinciales. Dos: que directamente Cristina no compita –en una suerte de renunciamiento épico- y que sea Randazzo el candidato de un justicialismo unificado, acompañado de una cara “no conflictiva” (ejemplo: la intendente de La Matanza, Verónica Magario). Eso sí: la tropa hiper K debería tener lugar reservado en las listas nacionales y en lugar expectantes.
Picardía de Fernando Espinoza, titular formal del PJ bonaerense: la opción dos implicaría que Cristina aparezca como la gran referente de ese armado consensuado. Casi como si Randazzo fuera el candidato de ella.

El cónclave
Es altamente improbable que el “Flaco” concurra a ese cónclave con destino casi definitorio. Irían en su nombre el diputado nacional Oscar Romero, el líder del Movimiento Evita, Fernando “Chino” Navarro, y Julián Domínguez.
El randazzismo especula con una tesis que es abonada por las propias declaraciones de Cristina. Ella dijo que sólo sería candidata de una unidad. “Si nosotros sostenemos la Primaria ella no se va a postular”, se escucha cerca del ex ministro. No por temor a perder sino porque no está dispuesta a discutir su liderazgo. Y si eso ocurre y el cristinismo presenta otro nombre para la Primaria (Magario, Daniel Scioli, Espinoza) evalúan que muchos intendentes terminarán jugado con Randazzo. Lo que cambiaría el adverso panorama electoral que las encuestas reflejan por éstos días. Suena entusiasta. 
Hay una “dead line” para todo esto: el 24 de junio vence el plazo para presentar las listas de candidatos. Se descuenta que tanto Randazzo como Cristina seguirán jugando a la guerra de nervios hasta ese mismo día.

El ex ministro insiste en desafiar a CFK, aunque los intendentes que le han jurado fidelidad se cuentan los dedos de una mano.

Si nosotros sostenemos la primaria, ella (Cristina) no se va a postular”, se escucha cerca del hombre de Chivilcoy. 

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